Hacia un movimiento mundial contra el apartheid en Palestina: Declaración de Johannesburgo sobre el colonialismo de colonos, el apartheid y el genocidio de Israel Global Anti-Apartheid Conference

 Hacia un movimiento mundial contra el apartheid en Palestina: Declaración de Johannesburgo sobre el colonialismo de colonos, el apartheid y el genocidio de Israel

Global Anti-Apartheid Conference, 23 de mayo de 2024

Documento final de la Conferencia Mundial Contra el Apartheid celebrada en Johannesburgo, Sudáfrica, del 11 al 12 de mayo de 2024.

Nosotros, delegados de más de dos docenas de países de todo el mundo, expresando las opiniones de millones de personas de todos los ámbitos de la vida, de todas las tendencias religiosas y no religiosas, de diversas opiniones políticas e ideológicas, reunidos en Johannesburgo , Sudáfrica, desde del 10 al 12 de mayo de 2024, estamos indignados por un siglo de colonialismo; 75 años de Nakba en curso; 75 años de genocidio, colonialismo y apartheid israelí; más de 75 años de robo de tierras; 75 años de represión y negación de derechos y libertades básicos. Los palestinos en Cisjordania (incluida Jerusalén), Gaza, las zonas del 48, los campos de refugiados y la diáspora han sufrido durante décadas bajo la maquinaria militar sionista.

Hemos sido testigos de siete meses de genocidio continuo. El mundo ha visto a Israel bombardear brutalmente Gaza desde tierra, mar y aire, convirtiéndola en un campo de exterminio. Israel ha destruido las condiciones de vida del pueblo de Gaza, incluida la atención médica, la nutrición, la educación y la infraestructura. Israel utiliza la violencia sexual, el hambre, la privación de agua, medicinas y asistencia médica como armas de guerra contra 2,3 millones de civiles en Gaza, en violación del derecho internacional y de cualquier sentido de ética y moral. La magnitud de la matanza en Gaza aún se revela a medida que se descubren fosas comunes. Israel está asesinando deliberadamente a niños y mujeres; mujeres que crean, sostienen y defienden la vida. Nos oponemos al genocidio reproductivo de Israel. Israel está destruyendo el medio ambiente y la infraestructura de Gaza para volverla inhabitable.

Los poderosos aliados occidentales de Israel, principalmente los Estados Unidos de América y algunos estados europeos, continúan permitiendo este genocidio contra el pueblo palestino con su suministro del armamento más sofisticado. También protegen a Israel diplomática y políticamente, incluido el uso del veto del Consejo de Seguridad de la ONU y la negativa a sancionar al estado de apartheid a pesar de sus atroces violaciones del derecho internacional. Las elites políticas y económicas occidentales se benefician de la sangre y las vidas de los palestinos en una forma de capitalismo de guerra indefendible.

La guerra llevada a cabo durante décadas por Israel y sus facilitadores genocidas no es sólo contra el pueblo palestino, sino contra la humanidad en su conjunto. Pero los palestinos y los pueblos del mundo no han guardado silencio.

Se ha escuchado a los palestinos en todo el mundo, desde debajo de los escombros, desde dentro de las tiendas de refugiados en Gaza, y se ha hecho eco a través de la resistencia en toda la Palestina ocupada. Su dolor se ha convertido en el dolor de todos nosotros; su ira, nuestra ira; su firmeza, nuestra firmeza; su lucha, nuestra lucha.

Las voces de las personas amantes de la justicia en todo el mundo se han escuchado en nuestras calles, en los medios de comunicación, en las redes sociales, en nuestros campamentos de estudiantes, lugares de culto, tribunales, lugares de trabajo y escuelas.

Estas voces han sido amplificadas en las instituciones multilaterales, en los tribunales internacionales, por las de nuestros líderes políticos y gobiernos con conciencia. A este respecto destacan los incansables esfuerzos del Gobierno de Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia. Estos esfuerzos deben incluir el procesamiento de todos los criminales de guerra israelíes. Seremos implacables en nuestra movilización para presionar a los gobiernos para que sancionen a Israel.

Todas estas voces dentro y fuera de Palestina se oponen firmemente al proyecto sionista colonialista, racista, de apartheid y genocida. Nos inspiramos en la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos que “se compromete a eliminar el colonialismo, el neocolonialismo, el apartheid, el sionismo y a desmantelar... todas las formas de discriminación”. ¡El sionismo es racismo!

Amplificamos aún más esas voces de ira y resistencia contra la violencia y la injusticia de Israel, y contra las maquinaciones imperialistas contra los palestinos y otros pueblos de todo el mundo.

Nosotros, inspirados por el Movimiento Anti-Apartheid global que ayudó a poner fin al apartheid en Sudáfrica y Namibia, y muchos de nosotros hemos sido parte de él, ahora nos levantamos, como continuación de ese movimiento, para enfrentar el colonialismo de colonos y el apartheid de Israel. y sus patrocinadores, para garantizar que Israel y los cómplices de su genocidio rindan cuentas, para apoyar la lucha por la liberación del pueblo palestino, por la restauración de sus derechos a la libertad, la dignidad, la autodeterminación, el retorno y la resistencia, tal como están garantizados por el derecho internacional.

Nos levantamos ahora como parte de un Movimiento Global Anti-Apartheid para Palestina, en solidaridad con los palestinos de todos los credos, orígenes e ideologías, que luchan contra la ocupación, el colonialismo, el apartheid y el genocidio en Palestina y en todo el mundo. Su heroísmo, fuerza y ​​sumud (firmeza) nos inspiran a alcanzar mayores alturas y a tomar medidas urgentes.

Nos levantamos con la determinación de lograr un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente para poner fin al genocidio de Israel, la retirada de las fuerzas israelíes, poner fin al terrorismo militar y de colonos en Cisjordania y levantar el asedio a Gaza. Los palestinos tienen derecho a la reconstrucción de todo lo que Israel ha destruido, a compensaciones y reparaciones. No descansaremos hasta el fin de la actual Nakba y hasta que Palestina sea liberada. Usaremos todas las estrategias y tácticas para trabajar hacia nuestro objetivo, incluido trabajar por el aislamiento total del Estado de apartheid israelí –como lo hizo el Movimiento Anti-Apartheid contra el Estado de apartheid sudafricano– mediante boicots, campañas de desinversión y sanciones, y otras estrategias de nuestro Plan de Acción.

Exigimos la liberación inmediata de todos los presos políticos, detenidos y rehenes palestinos, y exigimos el fin de los arrestos arbitrarios, la detención administrativa, los secuestros y la tortura de prisioneros.

Saludamos a los gobiernos que han demostrado su compromiso de enfrentar las injusticias israelíes y oponerse al colonialismo y el apartheid y actuar de acuerdo con sus obligaciones morales y legales como miembros de la comunidad internacional.

Condenamos a los gobiernos que han permitido o han sido cómplices del proyecto sionista, que –desde Balfour hasta Biden– siguen siendo cómplices incluso cuando Israel perpetra un genocidio y viola el derecho internacional con impunidad. El ataque de Israel es contra los valores humanos de verdad, derechos, justicia, igualdad y equidad; afianza el racismo y la represión violenta y amenaza a la humanidad con una devastación nuclear.

Apoyar al pueblo palestino significa apoyar a la humanidad, la justicia y la igualdad; significa oponerse a todas las formas de racismo: racismo antipalestino, racismo antinegro, antisemitismo, islamofobia. Nuestro Plan de Acción establece el desarrollo y crecimiento de un Movimiento Global Contra el Apartheid. Estamos decididos a trabajar urgentemente hasta la completa liberación del pueblo palestino.

En esta primera Conferencia Mundial Anti-Apartheid para Palestina, hemos iniciado un proceso para aprovechar la movilización generalizada en todo el mundo durante décadas, para intensificar la solidaridad palestina y construir el Movimiento Anti-Apartheid, incluido el de la Conferencia Mundial Contra el Racismo en Durban en 2001, y la sociedad civil palestina de 2005 llama a boicotear, desinvertir y aplicar sanciones contra Israel. Hacemos un llamado a todos los movimientos de solidaridad en todo el mundo para que se unan a este esfuerzo de construir un movimiento global contra el apartheid, que apoye a todos los pueblos oprimidos y explotados.

Estamos comprometidos a aislar al Israel del apartheid intensificando los boicots de consumo, académicos, deportivos, artísticos y culturales y aumentando la campaña de sanciones económicas y financieras. Daremos prioridad al bloqueo de sus rutas marítimas, a la campaña a favor de un embargo de armas contra Israel, a atacar a quienes apoyan, financian, suministran armas y se unen a las Fuerzas de Ocupación Israelíes, y a expulsar a Israel de los organismos deportivos, culturales y académicos internacionales.

Así como el movimiento global contra el apartheid no hizo concesiones al Estado sudafricano del apartheid hasta el completo desmantelamiento del sistema de apartheid, nosotros también nos negamos a ceder hasta el total desmantelamiento del proyecto colonial de colonos de Israel. Con eso estamos comprometidos y no pararemos hasta cumplir nuestro propósito.

¡Palestina será libre, desde el río hasta el mar! ¡Amanda! ¡Awethu! ¡Poder al Pueblo!