jueves, 16 de junio de 2022

La situación de los trabajadores de los territorios árabes ocupados Memoria del Director General Conferencia Internacional del Trabajo, 110.ª reunión, 2022


 

La situación de los trabajadores de los territorios árabes ocupados

Memoria del Director General

Conferencia Internacional del Trabajo, 110.ª reunión, 2022

Prefacio de Guy Ryder

De conformidad con el mandato que la Conferencia Internacional del Trabajo me ha confiado, este año envié una nueva misión encargada de elaborar un informe sobre la situación de los trabajadores de los territorios árabes ocupados. Los miembros de la misión visitaron la Ribera Occidental, incluida Jerusalén Oriental, así como Gaza, Israel y el Golán sirio ocupado. Tuve la oportunidad de conversar por videoconferencia con los mandantes de la OIT en la República Árabe Siria y el jefe de la misión se reunió en el Cairo, también por videoconferencia, con representantes de la Organización Árabe del Trabajo.

En los territorios árabes ocupados y en Israel, los miembros de la misión mantuvieron conversaciones exhaustivas con representantes de la Autoridad Palestina (AP), del Gobierno de Israel, de organizaciones de empleadores y de trabajadores de Palestina y de Israel, con ciudadanos del Golán sirio ocupado, con representantes de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales, así como con empresarios y trabajadores. Toda la información que facilitaron ha guiado la elaboración del presente informe. Estos miembros también realizaron varias visitas provechosas sobre el terreno.

Quisiera expresar mi agradecimiento a todos los interlocutores por su cooperación, pues reafirmaron una vez más el amplio apoyo concitado por los valores que encarna la Organización Internacional del Trabajo y la labor que esta realiza de continuo con todos sus mandantes. Como siempre, los miembros de la misión trabajaron con el objetivo de proceder a una evaluación completa, precisa e imparcial de la situación que atraviesan los trabajadores de los territorios árabes ocupados.

Desde hace más de cuatro decenios, los sucesivos Directores Generales de la OIT hemos venido presentando cada año a la Conferencia Internacional del Trabajo un informe relativo a la situación de los trabajadores de los territorios árabes ocupados, de conformidad con lo dispuesto en la resolución de la Conferencia de 1980.

Debo decir que en esta ocasión ha sido un ejercicio saludable releer el prefacio de mi primer informe, de 2013, en el cual ya señalé que «[p]ara evitar una espiral descendente hacia la crisis y la desesperación, primero es necesario entender que la situación actual es insostenible y lo seguirá siendo mientras no radique en la justicia social». A la sazón resalté que la persistencia de la ocupación y la expansión de las actividades de asentamiento bloqueaban la economía palestina. Advertí de los peligros

de una erosión grave de la confianza en la capacidad de las instituciones palestinas para lograr un crecimiento con un trabajo decente y respetuoso con los derechos fundamentales. Destaqué la situación alarmante que imperaba en Gaza y que amenazaba con volverse insostenible. Me referí a la ausencia de progreso en la superación de la división palestina y a la crisis fiscal de la Autoridad Palestina.

Mi opinión era que Israel debía relajar y levantar las restricciones impuestas a las personas y a las empresas, y que la comunidad internacional no debía conformarse con formular promesas y expresar deseos.

Sin embargo, la situación descrita en el presente informe muestra que todas estas consideraciones siguen siendo de actualidad, y ello da la medida de las frustraciones y la falta de progreso que se han venido acumulando en los últimos años. Este informe tiene el mérito de ofrecer una visión objetiva y desapasionada de la evolución de la situación registrada en los territorios árabes ocupados a la luz de los objetivos y del mandato de la OIT. Indica posibles vías de progreso a las que la OIT está, como siempre, dispuesta a contribuir. Un progreso cuya materialización depende, empero y en última instancia, de la voluntad política de los protagonistas israelíes y palestinos, así como de su disposición a trabajar de consuno, y también depende del apoyo y el sostenimiento de la comunidad internacional, que implica la perseverancia de los donantes.

Todos estos componentes deberían combinarse en los próximos años con una eficacia muy superior a la lograda en los diez últimos, para que la situación de los trabajadores de los territorios mejore de suerte que a estos depare perspectivas de trabajo decente y que a todas las personas que viven en la región ofrezca garantías básicas de estabilidad, seguridad y paz.

Mayo de 2022

Guy Ryder

Director General

 

Informe integro presentado en la Conferencia de la OIT, 2022

No hay comentarios:

Publicar un comentario