La empresa israelí con la que colaboran científicos de la Universidad de Oviedo participa en la guerra contra Gaza
Israel Aerospace Industries logró récord de ventas en 2023, pero todo apunta que 2024, con guerras en Ucrania y Gaza, y tambores de rearme en Europa, será un año todavía mejor. La empresa pública de armamento, con la que colaboran científicos de la Universidad de Oviedo/Uviéu a través de un proyecto europeo, es el principal exponente de la poderosa industria tecnológico-militar israelí. Un sector que genera el 18% del PIB nacional, y sin el que el país sería inviable económicamente.
Israel nació de una guerra en 1948, y vive en estado de guerra desde entonces. Por eso ha buscado la autosuficiencia militar desarrollando una poderosa industria bélica que a día de hoy exporta a todo el mundo. Israel es el décimo mayor exportador de armas del mundo.
IAI, fundada en 1953, es la compañía industrial de Israel que más vende fuera de sus fronteras y una de las 100 empresas más importantes de armamento a nivel mundial. Según las últimas clasificaciones ocupa el puesto 35. Fabrica drones, radares, aviones de combate, misiles y sistemas antimisiles, sistemas de defensa, satélites, lanzaderas espaciales, sistemas de navegación, comunicaciones y muchas otras tecnologías y productos. También moderniza y mejora aviones y helicópteros militares.
Los negocios de IAI están repartidos por todo el mundo. Fabrica para casa, pero también para mercados internacionales, incluidos países árabes. En un sector que mueve tanto dinero en contratos públicos, la corrupción no ha sido ajena al estilo de trabajo de IAI. En 2017 protagonizó un escándalo económico en Israel, que llevó a la policía israelí a realizar 13 detenciones en la cúpula de la empresa.
En el mercado europeo
IAI ha logrado entrar ahora en la UE a través de la compra de la empresa griega Intracom Defense AE. Gracias a esta operación la multinacional israelí puede acceder al dinero público que se mueve en proyectos como en el que participan los científicos de la Universidad de Oviedo/Uviéu. Se trata de un consorcio que cuenta con la participación de un total de doce empresas o instituciones de Italia, Chipre, Grecia, Alemania y España y que se dedica a detectar y caracterizar artefactos explosivos improvisados y minas terrestres ocultas en entornos complejos
Desde la Universidad alegan que “durante el proceso de resolución de la convocatoria pública, una de las empresas, la griega Intracom Defense AE es adquirida por Israel Aerospace Industries. Esa empresa israelí en ningún caso estaba en el consorcio y petición inicial que solicita la ayuda y en el que participa la Universidad de Oviedo”. Sin embargo, a día de hoy está.
“Las mayores corporaciones militares israelíes, Elbit Systems, IAI y Rafael, todas ellas muy involucradas en lo que ahora está pasando en Gaza, obtienen fondos sustanciales en proyectos europeos de I+D” señalaba recientemente Alejandro Pozo, del Centro Delás de Estudios para la Paz, en una entrevista a CTXT.
En la guerra de Israel contra Gaza de 2008 ya se utilizaron drones de IAI y en esta nueva ofensiva vuelve a estar presente como principal fabricante de armas del país. En su sitio web, IAI señala que la compañía está “completamente integrada” dentro de las “fuerzas navales, aéreas, espaciales y terrestres”, así como que sus “tecnologías sofisticadas” están desempeñado un “papel fundamental” en la guerra actual. “Nuestro compromiso inquebrantable incluye brindar apoyo inmediato a las necesidades operativas del sistema de defensa mientras continuamos brindando servicios y suministros de alta calidad a nuestros socios en todo el mundo” señala en otro comunicado el productor de armas y tecnología de defensa.
La Universidad de Oviedo/Uviéu se ha comprometido a abrir una investigación ética tras las revelaciones hechas por NORTES y las críticas de sindicatos, partidos y estudiantes.
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