Báhira Abdultalif, escritora y traductora iraquí, fue entrevistada en el programa El Mundo en 24h del canal de RTVE 24h para analizar la realidad de su país. Abdulatif asegura que “Iraq no está en una guerra civil entre sunníes y chiíes, Iraq está en contra de un gobernador, Al Maliki, que es un déspota de corte sectario [...] Maliki está oprimiendo a seis provincias que se supone de mayoría sunní, segregándolos, excluyéndolos, a lo que hay que sumar decenas de miles de detenidos. Son gente que llevan un año y medio con sentadas pacíficas. A principio de este año Maliki decidió acabar con estas manifestaciones pacíficas diciendo que dentro de esas acampadas había terroristas. Después empezó a bombardear a estos civiles. Lo que está pasando en Mosul no se puede separar de todos estos episodios, llevan meses con manifestaciones pacíficas, con un guión parecido a lo que ha pasado en Siria”.Sobre el supuesto enfrentamiento entre chiíes y sunníes Báhira Abdulatif responde que “nunca ha existido porque están emparentados [...] Las zonas del sur de mayoría chií tampoco están de enhorabuena, sufren exactamente igual pero no están siendo perseguidos. No tienen ninguna mejora en sus vidas desde hace 11 años.” En cuanto a la composición de los combatientes asegura que los del Estado Islámico de Iraq y Levante son una minoría escasísima, el 5 ó 10%, se han infiltrado desde Siria. Cuenta que acaba de “hablar con un amigo de Mosul y me ha dicho que la cosa está tranquila, que el gobierno les ha cortado el agua y la luz. Muchos civiles han salido de la zona de Mosul porque ahora mismo Maliki está bombardeando esas zonas a ciegas. Hay mucha manipulación, no hay corresponsales extranjeros en esta zona del país, solo están en Bagdad. [...] Maliki usa la palabra mágica que abre todas las puertas: “terroristas”, sabe que en Occidente hay mucho pánico en cuanto se habla de esto. Se presenta como el garante, el luchador contra el terrorismo [...] Maliki ha visto que ha perdido el apoyo de los kurdos, de los propios miembros de la coalición chií: Al Hakim, Moqtada al Sáder… Para volver a ganar el apoyo de los chiíes les dice “cuidado que vienen los sunnitas, son yihadistas que os van a matar [...] Maliki está repartiendo armas [entre voluntarios chiíes] y 500$ a cada voluntario.” “Si los pueblos se levantan contra el gobernante es porque tienen una causa justa, los pueblos son sabios”. Como salida a la actual situación Abdulatif cree que “hace falta un proyecto patriótico que aglutine a todos, hay que apoyar el levantamiento del pueblo iraquí y no satanizarlo”.
Enlace a la entrevista completa aquí:
El pasado sábado 21 de junio Pedro Rojo, arabista con una extensa trayectoria vital y profesional en el mundo árabe, analiza en la Cadena Ser la actual situación en Iraq transcurridos doce días tras la caída de Mosul en manos de los combatientes que hasta el momento han conseguido mantener el control sobre amplias zonas desde el noroeste hasta el centro y oeste del país. Ante la pregunta de si se trata de una guerra civil o no, Rojo afirma que “no hay guerra civil, no hemos llegado a este estadio, si las cosas no cambian rápidamente podríamos llegar, pero ahora mismo lo que hay es un levantamiento popular en el que se ha insertado el ejército del Estado Islámico de Iraq y el Sham (ISIS o ISIL, en su acrónimo en inglés o Daesh en árabe), pero es básicamente un levantamiento que viene ya desde 2011 con manifestaciones populares que empezaron, incluso, en 2009 en el sur de Iraq, en Basora, pidiendo servicios y el fin de la corrupción. Ese fue el inicio de lo que estamos viviendo ahora”.
Respecto a cómo se han manipulado y caricaturizado las relaciones entre sunníes y chiíes tras la ocupación de 2003 para justificar el nuevo status quo y la situación actual, Rojo asegura que “lo que se está intentando vender desde 2003 y ahora mismo es eso, el miedo. Desde el gobierno de Maliki lo que se está diciendo es que viene al-Qaeda y los takfiristas. Pero para que nos hagamos una idea de los que está pasando ahora mismo en esas zonas hay que recordar lo sucedido en Samarra (donde en 2006 pusieron la bomba sobre la gran mezquita, un lugar santo chií muy importante), hace dos semanas, antes de que cayese Mosul, el ejército ISIS entró en Samarra, solos, sin ningún grupo rebelde, y tuvieron que salir porque, ese mismo día, las tribus defendieron esos lugares santos, las mismas tribus que están ahora yendo hacía Bagdad, porque ésta es una línea roja [...] ahora mismo Samarra sigue en poder del ejército iraquí de acuerdo con estas tribus, porque han dicho no queremos que esta gente explote el cisma sectario, volviendo a atacar los lugares santos, dando pábulo a los que, desde Maliki y las milicias chiíes, quieren vender esto como una guerra sectaria”.
Un sectarismo ajeno al Iraq previo a 2003 y que Pedro Rojo tuvo la oportunidad de visitar varias veces: “los que viajábamos a Iraq antes de la ocupación, nadie nos preguntábamos o preguntábamos a ningún iraquí si era sunní o chií. El 70% de los matrimonios antes de 2003 eran mixtos, ¿cómo puedes dividir una sociedad en la que el padre es sunní y la madre es chií?”. De hecho el padecimiento que sufre la población iraquí es generalizado y se extiende a las zonas consideradas feudos electorales del Maliki: “en el sur pasa exactamente los mismo, Basora es una ciudad miserable ahora mismo, ni siquiera han cuidado a los que se supone son su base popular, claro que hay un hartazgo total con este sistema político”.
En relación a la capacidad real de hacer frente a los terroristas, Rojo segura que “los únicos que van a ser capaces de expulsar al-Qaeda, Daesh o ISIL de esa zona son los propios iraquíes” recordándonos que “en 2008 tardaron 15 días en sacar al-Qaeda de al-Dura y de Adamiyya, y fueron ellos porque saben quiénes son [los terroristas], los iraquíes son los que controlan el terreno”, algo que no han sido capaces de controlar “ni EEUU ni Maliki en diez años”. Por otro lado, las opciones reales que tiene EEUU “son muy limitadas, ¿qué van hacer?, no consiguieron dominar el país cuando tenían 200 mil tropas sobre el terreno [...]. ¿Van a darles armas a Maliki que está luchando con Assad en Siria? ¿Van a entregar un F16 a un gobierno que está apoyando a Al Assad, cuyas milicias han tenido que volver a la carrera de Siria para defender Bagdad?”.
A pesar de que la terrible situación que ha llevado a tantos iraquíes a añorar épocas anteriores, durante los cuales había, al menos, estabilidad, servicios sociales y seguridad, Rojo nos invita a mirar hacia delante: “no es cuestión de mirar al régimen del Baaz, ni siquiera es lo que los propios baacistas están pidiendo [...]. En un encuentro que hubo el 10 de junio en la Cámara de los Lores (Londres), un grupo de la oposición iraquí presentó la propuesta [...] de un Iraq democrático, donde no haya sectarismo, donde haya una representación real. [...] Eso es lo que están pidiendo los rebeldes, el final de este sistema sectario impuesto por cuotas y manipulado por todas las potencias regionales e internacionales y que sean los propios iraquíes los que defiendan un sistema democrático plural y sin sectarismo”.
Enlace a la entrevista completa aquí:
* Báhira Abdulatif es escritora, traductora y fundadora de la editorial de difusión cultural en árabe El Aleph 2000, y Pedro Rojo, además de arabista es miembro de la CEOSI y presidente de la Fundación Al Fanar.
Fuente original: http://www.iraqsolidaridad.org/2014/06/no-es-una-guerra-civil-es-un-levantamiento-popular/
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El pasado sábado 21 de junio Pedro Rojo, arabista con una extensa trayectoria vital y profesional en el mundo árabe, analiza en la Cadena Ser la actual situación en Iraq transcurridos doce días tras la caída de Mosul en manos de los combatientes que hasta el momento han conseguido mantener el control sobre amplias zonas desde el noroeste hasta el centro y oeste del país. Ante la pregunta de si se trata de una guerra civil o no, Rojo afirma que “no hay guerra civil, no hemos llegado a este estadio, si las cosas no cambian rápidamente podríamos llegar, pero ahora mismo lo que hay es un levantamiento popular en el que se ha insertado el ejército del Estado Islámico de Iraq y el Sham (ISIS o ISIL, en su acrónimo en inglés o Daesh en árabe), pero es básicamente un levantamiento que viene ya desde 2011 con manifestaciones populares que empezaron, incluso, en 2009 en el sur de Iraq, en Basora, pidiendo servicios y el fin de la corrupción. Ese fue el inicio de lo que estamos viviendo ahora”.
Respecto a cómo se han manipulado y caricaturizado las relaciones entre sunníes y chiíes tras la ocupación de 2003 para justificar el nuevo status quo y la situación actual, Rojo asegura que “lo que se está intentando vender desde 2003 y ahora mismo es eso, el miedo. Desde el gobierno de Maliki lo que se está diciendo es que viene al-Qaeda y los takfiristas. Pero para que nos hagamos una idea de los que está pasando ahora mismo en esas zonas hay que recordar lo sucedido en Samarra (donde en 2006 pusieron la bomba sobre la gran mezquita, un lugar santo chií muy importante), hace dos semanas, antes de que cayese Mosul, el ejército ISIS entró en Samarra, solos, sin ningún grupo rebelde, y tuvieron que salir porque, ese mismo día, las tribus defendieron esos lugares santos, las mismas tribus que están ahora yendo hacía Bagdad, porque ésta es una línea roja [...] ahora mismo Samarra sigue en poder del ejército iraquí de acuerdo con estas tribus, porque han dicho no queremos que esta gente explote el cisma sectario, volviendo a atacar los lugares santos, dando pábulo a los que, desde Maliki y las milicias chiíes, quieren vender esto como una guerra sectaria”.
Un sectarismo ajeno al Iraq previo a 2003 y que Pedro Rojo tuvo la oportunidad de visitar varias veces: “los que viajábamos a Iraq antes de la ocupación, nadie nos preguntábamos o preguntábamos a ningún iraquí si era sunní o chií. El 70% de los matrimonios antes de 2003 eran mixtos, ¿cómo puedes dividir una sociedad en la que el padre es sunní y la madre es chií?”. De hecho el padecimiento que sufre la población iraquí es generalizado y se extiende a las zonas consideradas feudos electorales del Maliki: “en el sur pasa exactamente los mismo, Basora es una ciudad miserable ahora mismo, ni siquiera han cuidado a los que se supone son su base popular, claro que hay un hartazgo total con este sistema político”.
En relación a la capacidad real de hacer frente a los terroristas, Rojo segura que “los únicos que van a ser capaces de expulsar al-Qaeda, Daesh o ISIL de esa zona son los propios iraquíes” recordándonos que “en 2008 tardaron 15 días en sacar al-Qaeda de al-Dura y de Adamiyya, y fueron ellos porque saben quiénes son [los terroristas], los iraquíes son los que controlan el terreno”, algo que no han sido capaces de controlar “ni EEUU ni Maliki en diez años”. Por otro lado, las opciones reales que tiene EEUU “son muy limitadas, ¿qué van hacer?, no consiguieron dominar el país cuando tenían 200 mil tropas sobre el terreno [...]. ¿Van a darles armas a Maliki que está luchando con Assad en Siria? ¿Van a entregar un F16 a un gobierno que está apoyando a Al Assad, cuyas milicias han tenido que volver a la carrera de Siria para defender Bagdad?”.
A pesar de que la terrible situación que ha llevado a tantos iraquíes a añorar épocas anteriores, durante los cuales había, al menos, estabilidad, servicios sociales y seguridad, Rojo nos invita a mirar hacia delante: “no es cuestión de mirar al régimen del Baaz, ni siquiera es lo que los propios baacistas están pidiendo [...]. En un encuentro que hubo el 10 de junio en la Cámara de los Lores (Londres), un grupo de la oposición iraquí presentó la propuesta [...] de un Iraq democrático, donde no haya sectarismo, donde haya una representación real. [...] Eso es lo que están pidiendo los rebeldes, el final de este sistema sectario impuesto por cuotas y manipulado por todas las potencias regionales e internacionales y que sean los propios iraquíes los que defiendan un sistema democrático plural y sin sectarismo”.
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* Báhira Abdulatif es escritora, traductora y fundadora de la editorial de difusión cultural en árabe El Aleph 2000, y Pedro Rojo, además de arabista es miembro de la CEOSI y presidente de la Fundación Al Fanar.
Fuente original: http://www.iraqsolidaridad.org/2014/06/no-es-una-guerra-civil-es-un-levantamiento-popular/