martes, 30 de noviembre de 2021

CONFERENCIA SOBRE EL SÁHARA

 

Pregunta del BNG en el Congreso de los Diputados sobre el juicio a Juana Ruiz en Israel

 

Pregunta del BNG en el Congreso de los Diputados sobre el juicio a Juana Ruiz en Israel 

A LA MESA DEL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
Al amparo de lo establecido en el artículo 185 y siguientes del Reglamento del Congreso de los Diputados, el diputado del BLOQUE NACIONALISTA GALEGO (BNG), Néstor Rego Candamil, adscrito al GRUPO PLURAL, formula las siguientes preguntas dirigidas al Gobierno para su respuesta escrita. 

El caso de Juana Ruiz Sánchez ilustra el sistema judicial y leyes israelíes: una ciudadana del Estado español que trabajaba en una organización sanitaria palestina, Health Work Commitees, en los Territorios Ocupados, que vive en la zona A, y ejerce su actividad en territorio palestino, es secuestrada y metida presa por fuerzas militares israelíes. La potencia ocupante que expropia, que expulsa a los palestinos, que tiene legalizada la tortura, los asesinatos extrajudiciales, la detención administrativa sine die y que está acusada de crímenes de guerra y lesa humanidad, Israel, declara ilegal a la organización sanitaria y la acusa, sin pruebas, que financia a una organización declarada terrorista. De paso, Juana Ruíz tiene que admitir ante un tribunal militar de ocupación israelí que trabaja para esta organización sanitaria, ahora ilegal para Israel y legal en los Territorios Ocupados, y que recauda fondos para HWC necesarios para cubrir las necesidades de la población que la potencia ocupante no atiende. 

Israel, faltando a su obligación de atender las necesidades sanitarias de la población palestina ocupada, más en el contexto de la pandemia mundial, pretende impedir que éstas sean cubiertas mediante donaciones de la cooperación internacional creando dudas y sospechas. Israel ha lanzado las mismas acusaciones de desvío de recursos a otras organizaciones palestinas, entre ellas Al Haq y Adameer, amicus curiae de la Corte Penal Internacional en la acusación de crímenes de guerra y lesa humanidad a Israel. 

En este proceso, tanto el Estado español como la Unión Europea han declarado no encontrar prueba alguna de desvío de dinero. Algunos donantes han solicitado explicaciones a la potencia ocupante, pero mientras tanto han cortado sus ayudas a la población palestina y a las organizaciones de vigilancia de derechos humanos. Uno de los objetivos estratégicos israelíes. 

Por los motivos expuestos, el BNG formula las siguientes preguntas al Gobierno: 
1. ¿Admite, como proceso legal y legítimo, el sistema judicial de la potencia ocupante y, por lo tanto, la pena impuesta a una ciudadana española y al resto de las organizaciones y población palestina? 
2. Si no es así, ¿qué medidas diplomáticas ha tomado, más allá de la atención personal prestada por los servicios consulares? 
3. Si comparamos las medidas adoptadas respecto a otros Estados ocupantes de territorios, ¿Está el Estado español aplicando las mismas sanciones a Israel? 

Madrid, a 30 de noviembre de 2021 
Néstor Rego Candamil 
Diputado del BNG en el Congreso
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Fayrouz Sharqawi: "El tranvía de Jerusalén es una herramienta colonial que une los asentamientos del este y el oeste "

 ICHARD WEYNDLING (INTERNAZIONALISTAK AUZOLANEAN) / PAMPLONA 29.11.2021 |

Noticias de Navarra
Fayrouz Sharqawi , coordinadora de promoción de Grassroots al-Quds. Foto: https://eyewitnesspalestine.org
Fayrouz Sharqawi , coordinadora de promoción de Grassroots al-Quds. Foto: https://eyewitnesspalestine.org









Hablamos con Fayrouz Sharqawi de la organización Grassroots Al Quds (Jerusalén) sobre estos acontecimientos, sobre el afán de Israel de hacer limpieza étnica en Jerusalén y sobre el papel de CAF en este crimen según la ley internacional

Juani Ruiz, una mujer española que ha dedicado su vida profesional a la sanidad en Palestina, acaba de ser condenada por un tribunal militar israelí tras haber pasado siete meses en prisión. Fue acusada de recaudar fondos para una organización terrorista y condenada sin pruebas por un tribunal militar. Un total de seis organizaciones que trabajan en los campos de sanidad, agricultura, derechos humanos, derechos de los y las prisionero y prisioneras, derechos de la mujer y de la niñez también han sido acusadas de financiar el terrorismo e ilegalizadas.

La alta comisionada de Naciones Unidas Michelle Bachelet condenó la decisión de Israel, llamándolo "un ataque contra los defensores de los derechos humanos, las libertades de asociación, opinión y expresión y contra el derecho de participación pública'', y dijo que "debería ser revocado de inmediato." Bachelet afirmó que los grupos diana eran "algunos de los grupos de derechos humanos y humanitarios más respetados en el territorio ocupado Palestino y que han trabajado durante décadas con la ONU.".

¿Puede explicar cómo utiliza Israel la palabra terrorismo y por qué sintió la necesidad de meter a Juani Ruiz en prisión y calumniar estas organizaciones humanitarias?

-Creo que el régimen de ocupación israelí, como cualquier otro colonizador, ve una amenaza en la sociedad civil palestina y es por eso que hemos visto en años recientes la escalada en acusaciones tanto a individuos como a organizaciones de trabajar contra el Estado de Israel y del terrorismo. Es un uso clásico del término, criminalizar actores de la sociedad civil, es una forma de aterrorizar a la gente y mandar un mensaje a todos los que estén trabajando en contra de la ocupación y colonización de que serán enjuiciados. Es una continuación natural de un proceso que se ha desarrollado a lo largo de los últimos años con la legislación israelí haciendo que lo que se conoce como "trabajar contra el Estado de Israel" sea un acto criminal y que conlleva implicaciones legales.

Es importante verlo dentro de un contexto más amplio, si recordamos el levantamiento que tuvo lugar en mayo y junio de este año, fue un momento en el que todos: a los ocupantes, al mundo y a la misma gente de la calle de palestina les recordó que el pueblo palestino sigue aquí y que tiene una comprensión muy clara de su propia lucha contra el colonialismo y la ocupación. Ilegalizar estas organizaciones es una de las muchas reacciones que hemos visto recientemente por parte de las autoridades de la ocupación que trabajan en contra de estos actores.

¿Cree que tiene algo que ver con las investigaciones del ICC sobre los crímenes de guerra israelíes? 

–Aunque debo decir que los y las palestinos y palestinas tienen un poco de desconfianza hacia el sistema judicial internacional y a su capacidad para influir en nuestra realidad, desde luego que esto podría tener algo que ver. El termino terrorismo es utilizado no solo aquí en Palestina sino en todo el mundo como una palabra mágica que abre la puerta a mayor control para una monitorización más cerrada de la gente, de la misma forma en que la crisis sanitaria del coronavirus fue utilizada en el contexto Palestino-israelí como una herramienta de colonización para reforzar su control sobre la gente. Y creo que este es un buen momento para que todos y todas pongamos en cuestión la palabra terrorismo y lo que realmente significa.

Hablando sobre las seis organizaciones palestinas que fueron declaradas como cómplices del terrorismo, no hay ninguna prueba en los informes que las autoridades de la ocupación han presentado que lo corrobore.

Pero creo que lo más importante es fijarse en el término terrorismo y ver cómo se utiliza y qué es definido como terrorismo. Quiero decir ¿por qué no estamos hablando sobre terrorismo estatal israelí, sobre terrorismo colonial israelí que se está utilizando contra el pueblo palestino no solo en Gaza sino en toda Palestina. Creo que es una buena oportunidad para que todos y todas paremos y examinemos la forma en la que el mundo permite que se utilice la palabra terrorismo.

¿Qué le dice el hecho de tener preso a una ciudadana española durante siete meses sobre la relación entre Israel y el Estado español y con otros estados occidentales en general?

–Esta es una de las muchas historias que muestran que el Estado israelí de ocupación tiene sus intereses y los protege y cómo el mundo en general tolera este comportamiento indignante por parte de Israel, comportándose como el mocoso malcriado que hace lo que quiere y que, incluso cuando se trata de los intereses y soberanía de otros países, por alguna razón estos gobiernos lo consienten.

La propaganda israelí, que ha estado funcionando de forma muy efectiva en Europa, EEUU y otros países del norte global, está consiguiendo que otros países sean tímidos a la hora de manifestarse contra la ocupación, contra el colonialismo. Además de la propaganda creo que los intereses económicos son la razón que está detrás de esto, detrás del silencio de los gobiernos, cuando sus propios ciudadanos están siendo criminalizados, en contra de toda lógica y ley por defender la liberación palestina.

¿Si el gobierno israelí siente que tiene impunidad para tratar a una ciudadana española de esta manera, cómo trata a las personas palestinas que quiere castigar?

–No ha habido apenas un posicionamiento claro a nivel global sobre la gran cantidad de palestinos y palestinas que están siendo asesinados y asesinadas por la ocupación año tras año. Creo que se normaliza cada vez más la muerte de personas palestinas –como si se murieran por causas naturales– cuando han sido asesinadas decenas y cientos cada año desde el comienzo de la colonización israelí.

Aquellas personas que no son asesinadas son encarceladas. Estamos hablando de más de 4.500 presas palestinas en cárceles israelíes en estos momentos. Y tenemos que recordar que estas personas no son criminales. Muchas de ellas están detenidas bajo la llamada detención administrativa, que significa que no se han presentado pruebas contra ellas, pero están detenidas en base a las llamadas pruebas secretas. Algunas de estas personas están en huelga de hambre para protestar por su detención ilegal y muchas son organizadoras comunitarias y trabajadoras de derechos humanos, ONG, etc.


La Cúpula de la Roca, en la explanada de las mezquitas, vista tras una alambrada. Foto: Mundubat/www.theotherjerusalem.org

Fayouz, usted es una ciudadana palestina de Jerusalén/Al Quds. ¿Podría hablarnos sobre la organización con la que trabaja, Grassroots Al Quds?

–Grassroots Al Quds es una plataforma para la organización comunitaria palestina y la movilización y networking en Jerusalén. Nuestro objetivo es investigar y contar el relato de Jerusalén desde el punto de vista palestino. Nuestra investigación se centra en la documentación de la historia de Jerusalén y la situación actual bajo ocupación israelí porque consideramos que este conocimiento es una herramienta que la gente puede utilizar a nivel global y a nivel local.

Apoyamos la organización comunitaria y las iniciativas y organizaciones de base. Y construimos contactos entre ellas para que juntas puedan crear estrategias a largo plazo para Jerusalén, logrando así realizar nuestra visión para la ciudad. A nivel global, contamos la historia de Jerusalén incluyendo el uso de nuestras herramientas para comunicar virtualmente y nuestro libro la guía Grassroots Jerusalén, porque creemos en la importancia de dar voz a la gente palestina, una narrativa que es a menudo censurada o reducida. Es necesario combatir la desinformación a nivel global sobre lo que está sucediendo en Palestina y en Jerusalén.

En 2017 la administración Trump accedió a la exigencia israelí de reconocer a Jerusalén como capital del Estado de Israel. ¿Qué relevancia tuvo este hecho?

–Creo que debería ser visto como un hito más en una línea del tiempo. No es un antes y un después. Pero fue desde luego un resultado directo de los acontecimientos de los últimos años. Especialmente la creciente tolerancia global hacia la ocupación israelí de Palestina y hacia la continua desposesión y desplazamiento de su pueblo. Creo que la declaración abrió el camino para que otros países fueran explícitos en su apoyo a la ocupación de Palestina.

También ha hecho que las autoridades de la ocupación sean más descaradas a la hora de implementar sus planes para Jerusalén y para la transformación de la ciudad que ha ido progresando de forma constante desde 1948 y especialmente desde 1967. Sus planes y prácticas se han vuelto más agresivas y represivas en los últimos años.

¿Cuál es el plan del Gobierno israelí para Jerusalén?

–Desde la ocupación de 1967 el plan para Jerusalén ha sido abiertamente la creación de una población mayoritaria judía en la ciudad y consolidar su control sobre el este y el oeste de Jerusalén para crear la llamada capital unida e indivisa del Estado de Israel, lo cual significa echar a la población palestina con leyes, políticas y planes maestro de la ciudad. Una ciudad que no deja lugar para las personas palestinas y crea más y más infraestructura para la colonización y presencia colona en la ciudad, ya sea residencial o económica. Los planes maestros para Jerusalén, sobre todo el plan Jerusalén 2020 y ahora otros planes como Jerusalén 2050, buscan convertir Jerusalén en un centro económico y de negocios. Estos planes suelen traducirse en un desplazamiento más agresivo de los y las residentes palestinos a través de la revocación de su estatus legal, quitándoles el permiso para vivir en su propia ciudad. Políticas de planificación como la confiscación de viviendas y la demolición de viviendas son muy comunes en Jerusalén. La extirpación literal de las personas palestinas quitándoles su tierra y demoliendo sus casas y empujándolas a abandonar Jerusalén. A la vez, se establecen más colonias y las antiguas se expanden de forma continua. Proyectos económicos coloniales como zonas industriales, centros comerciales y distritos de negocios, se construyen además de las miles de viviendas que se crean cada año.

Este es el contexto en el que se deben entender las noticias que la gente pueda haber escuchado este año, noticias provenientes de Shiekh Jarrah y Silwan. Estas son dos comunidades palestinas muy importantes situadas justo a las afueras de la ciudad antigua, Shiekh Jarrah al norte y Silwan al sur. Son parte del cinturón colonial más estrecho que es el centro de la ciudad. El objetivo es sionizar todo el centro de la ciudad, la ciudad antigua y sus inmediaciones y es exactamente por eso que, observando Shiekh Jarrah y Silwan, puedes ver cuántos distintos tipos de colonización están siendo implementados allí.

La gente habrá oído noticias sobre Shiekh Jarrah especialmente en mayo y junio, pero aún hoy hay 28 familias que se enfrentan al riesgo inminente de ser expulsadas de sus casas porque organizaciones de colonos están reclamando sus derechos sobre el terreno en el que están construidas sus casas. Ya hay un centro médico israelí, un edificio que pertenece a la llamada institución nacional de seguros y hay un llamado parque nacional declarado en los terrenos de Shiekh Jarrah, que es una forma de hacer greenwashing de la ocupación. También hay que tener en cuenta que ya hay colonos viviendo en distintas partes del barrio. En Silwan hay outposts, edificios que han sido tomados por los colonos y convertidos en colonias de edificio único. Solamente en Silwan hay 70 outposts de este tipo. Pero además de eso hay un llamado parque nacional y centro de visitantes bautizado "La ciudad de David" que es gestionado por la organización de colonos llamada Elad.

Más de 170 familias se enfrentan a la amenaza de ser expulsadas de sus casas. 70 casas van a ser demolidas para crear un parque temático, un "parque bíblico" llamado "El jardín del rey". Y otras 80 familias se enfrentan a querellas de colonos que dicen ser los propietarios legítimos. Alegan que son dueños de la tierra utilizando los tribunales israelíes para quitarles las propiedades a los palestinos. Los diferentes proyectos se están desarrollando conjuntamente de forma muy estratégica y efectiva para echar a la población palestina y asentar a los colonos israelíes.

¿Lo que describe podría ser llamado justamente limpieza étnica?

–Desde luego. La limpieza étnica como herramienta colonial no se inventó en Palestina, pero es una parte integral del régimen colonial. Desde 1967 aquellas personas palestinas que viven en la parte este de Jerusalén se han tenido que enfrentar a una limpieza étnica. Es sistemático. Ya no es tan violento y rápido como en la limpieza étnica de 1948 cuando todos y todas los y las palestinos y palestinas de la parte oeste de Jerusalén fueron masacrados y masacradas y expulsados y expulsadas a la fuerza con armas de fuego y bombas. En 1967 se empezaron a elaborar planes para la expulsión y ha tomado una forma diferente, utilizando la ley israelí que es una herramienta colonial que crea la ilusión de que estos palestinos y palestinas están siendo expulsados y expulsadas porque están infringiendo la ley. Según las leyes internacionales todo lo que están haciendo es ilegal, los asentamientos, el robo de propiedades y todo lo demás.

¿Cómo está participando CAF en este proceso a través de la construcción y operación del proyecto del tranvía de Jerusalén?

–El proyecto del tranvía es como cualquier otro proyecto que se vende como un proyecto de desarrollo urbano y como una herramienta moderna que revitalizará Jerusalén e impulsará la economía. Pero si nos fijamos detenidamente en los planes del tranvía, las líneas existentes y las nuevas que se están construyendo ahora mismo, vemos que el Jerusalem Light Rail (tranvía) es otra herramienta colonial cuyo principal objetivo es conectar los asentamientos en el este con la parte oeste de la ciudad haciendo así que sea más fácil para la población colona israelí vivir en estas colonias y viajar hasta el trabajo en el centro económico. Es parte de la llamada guerra demográfica que las autoridades israelíes han declarado contra la gente palestina, especialmente en Jerusalén.

El tranvía forma parte de una red de infraestructura junto con carreteras que conectan asentamientos del margen oeste entre sí y con Jerusalén y las múltiples líneas de bus que han circulado ya entre los asentamientos durante décadas. CAF, que es cómplice y socio financiero en este proyecto colonial, está tomando un rol activo en la expulsión y desposesión de palestinos y palestinas en Jerusalén simplemente para conseguir beneficio económico.

¿Cómo están trabajando las personas de Shiekh Jarrah y otros barrios para defender sus barrios y su derecho a vivir en sus propias casas?

–La gente de Shiekh Jarrah y de Silwan han dado un buen ejemplo de organización comunitaria. La fragmentación de las comunidades palestinas es un contexto muy desafiante en el que estamos viviendo. Por lo tanto, es muy alentador ver cómo estas comunidades han conseguido organizarse y unirse en una sola comunidad o trabajar juntos y construir redes entre ellos y ellas y con otras comunidades en el Jerusalén palestino.

Es destacable la manera en que utilizaron los medios de comunicación, a nivel local y global, especialmente las redes sociales para movilizar las conexiones que tenían y las conexiones que construyeron durante el levantamiento entre Shiekh Jarrah y movimientos en todo el mundo. Decenas de miles de personas salieron a las calles durante mayo y junio en apoyo a la lucha palestina en Jerusalén y en toda Palestina.

Llamamos al levantamiento la Intifada de la Unidad, porque fue un momento en el que todas las partes fragmentadas de Palestina se movilizaron juntas, algo no visto desde la primera intifada (en la década de los 80).

¿Qué puede hacer la gente en Navarra, Euskal Herria y el Estado español para apoyar los derechos del pueblo palestino?

–En la solidaridad con Palestina se trata sobre todo de ser responsable y hacer que tu gobierno y tus empresas sean responsables y de decir "con nuestro dinero no continuarás apoyando y desarrollando la ocupación y colonización israelí de Palestina."

¿Y un mensaje para las personas que trabajan para CAF y las comunidades que dependen de la empresa para su bienestar económico?

–Es legítimo preocuparte sobre tu propia existencia, de tu comunidad y de tu familia, pero también es importante que aquellas personas que trabajen en esa empresa o que dependen de ella –con sus prácticas y participación actual en Palestina– sean conscientes de que esto está sucediendo a expensas de la población palestina, de su sustento y de sus familias. Creo que nosotras, las comunidades del mundo debemos apoyarnos los y las unos y unas a los y las otros y otras. Necesitamos utilizar nuestro poder para poner fin a la explotación de gente con fines lucrativos. Podemos responsabilizar a CAF y eso debe hacerse. Movilícense contra la implicación de CAF en Palestina y di "no permitiré que mi sustento sea a expensas de otras personas".

Habrá una movilización por Palestina y contra la ilegalización de las ONG en el Día Internacional de Solidaridad con Palestina con el apoyo y participación de Rotten XIII. Estatua Carlos III, Plaza del Castillo, 29 de noviembre a las 19:00.


lunes, 29 de noviembre de 2021

Almudena Grandes, una grande, gran solidaria

 



Almudena Grandes fue premiada, entre otras cosas, con el XXV premio Pasionaria de IU Xixón, en el año 2018. En el año 2021 fue concedido a Juana Ruíz y el mismo día del premio de este año nos llegó la noticia de la muerte de Almudena.
En varias ocasiones hemos tenido ocasión de encontrarnos con Almudena Grandes y su compañero Luís García Montero. En todas, además de las palabras iniciales de cortesía, la habíamos solicitado, les habíamos solicitado, su firma para manifiestos, apoyos, a favor de Palestina, contra la guerra,... Siempre las teníamos. También su palabra, su apoyo eran constantes y facilitaban que otros amigos suyos también hicieran lo propio.
La última vez, ha sido con motivo de la petición de firmas al Manifiesto "El antisemitismo es racismo y el antisionismo es anticolonialismo" cuyo primer firmante ha sido el profesor Pedro Martínez Montávez, gran amigo. Este asunto es de gran actualidad frente al interesado discurso proisraelí de querer convertir cualquier crítica a sus políticas racistas y coloniales en esa etiqueta para amedrentar a las personas y organizaciones que buscan la paz justa en Palestina. No así, para Almudena Grandes y Luís García Montero.
El antisionismo es un deber moral y la defensa de una paz justa frente al racismo y colonialismo israelí en algunos medios mediáticos y literarios es complicado. Frente a ello Almudena y Luís siempre han dado la cara. De ahí nuestra gratitud y nuestros lamentos ante el fallecimiento de Almudena Grandes y el querer acompañar en estos momentos a Luís García Montero, su familia y amigos.

Humanidad
Almudena Grandes
El País, 4 de enero de 2009


La ministra de Exteriores de Israel dijo, horas antes de la invasión, que en Gaza no había crisis humanitaria y por tanto no era necesaria una tregua humanitaria.


Hasta si su gobierno no fuera responsable ya de quinientos cadáveres, y de la indeterminada cifra de víctimas que se proyecta en el horizonte, sus palabras serían escalofríantes. En Gaza se hacinan, como en un campo de concentración, un millón y medio de personas cuya subsistencia depende de la voluntad de sus carceleros. Israel consintió que Hamás se presentara a las elecciones de 2006 para decretar, tras su victoria, un bloqueo económico tan brutal que, aplicado casi a cualquier otro lugar, constituiría en sí mismo toda una crisis humanitaría.

Cabría preguntarse qué es un ser humano para la señora Livni, porque no se trata de conceptos como seguridad, bienestar o garantías. Antes de que el ejército israelí arrasara Gaza por la fuerza, sus habitantes no tenían comida, ni agua ni luz eléctrica, ni medicinas ni combustibles, a veces durante horas, a veces durante días enteros. Cabría responderse por tanto, y ciñéndose escrupulosamente a sus palabras, que para la señora Livni, los palestinos no son seres humanos. Que una ministra de Israel, representante de un estado surgido del horror que estremeció al mundo al constatar que el pueblo judío había sido tratado como no humano por el III Reich, diga cosas así, es tan desolador que se comenta solo.

¿Y los demás? El problema es Hamás, dicen. ¿Y cuándo no existía Hamás? Entonces, el problema era Arafat. ¿Y de dónde salió Arafat? La violencia no sólo engendra violencia en Oriente Próximo, pero sólo allí se priva a las víctimas hasta del pobre consuelo de la palabra "desproporción". Cabría pensar que la culpa es de los propios palestinos, de esa terca insistencia suya en seguir siendo, pese a todo, seres humanos.



Que sean las palabras del propio Luís García Montero las que despidan a Almudena

Como el cuerpo de un hombre derrotado en la nieve,
con ese mismo invierno que hiela las canciones
cuando la tarde cae en la radio de un coche,
como los telegramas, como la voz herida
que cruza los teléfonos nocturnos
igual que un faro cruza
por la melancolía de las barcas en tierra,
como las dudas y las certidumbres,
como mi silueta en la ventana,
así duele una noche,
con ese mismo invierno de cuando tú me faltas,
con esa misma nieve que me ha dejado en blanco,
pues todo se me olvida
si tengo que aprender a recordarte.

                                              Luís García Montero

                                    Hasta siempre Almudena   


La CSI insta a la ONU a que actualice su lista de empresas que apoyan los asentamientos ilegales

 Para conmemorar el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, que se celebra el 29 de noviembre, la CSI ha escrito al Secretario General de la ONU António Guterres con el objetivo de instarle a que apoye la resolución que requiere actualizar con regularidad la base de datos de la ONU donde se detallan las empresas que operan ilegalmente en los asentamientos israelíes ubicados en territorios palestinos.



Asimismo, la CSI está presionando para que se vuelva a iniciar el proceso de paz y se reconozca a Palestina como un Estado.


El 12 de febrero de 2020, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU publicó una base de datos con 112 empresas, pero desde entonces no se ha vuelto a actualizar, a pesar de que la resolución 31/36 así lo exige, junto a la recomendación de “que el Consejo de Derechos Humanos establezca un grupo de expertos independientes, con un mandato de duración determinada, para transmitir dichos datos directamente al consejo mediante un informe a tal efecto”. Hasta la fecha, todavía no se ha designado dicho grupo de expertos.


La Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow, declaró: “Agregar y borrar a las empresas de la tan esperada base de datos genera trabas e incentivos necesarios para que estas no se impliquen en la industria israelí de los asentamientos ilegales”.


“Es fundamental que el Secretario General de la ONU haga todo lo posible para garantizar que dicha actualización se finalice y publique y que se designe al grupo de expertos independientes sin más dilación para respaldar la base de datos. No solo en aras de la justicia para el pueblo palestino, sino también para las empresas incluidas en la base de datos original que, desde entonces, han cortado sus vínculos con los asentamientos ilegales israelíes”.


El Estado número 194


En dicha carta, la CSI también insta a la ONU a que lidere una conferencia de paz internacional en 2022 para reiniciar un proceso de paz que se base, ante todo, en “el cumplimiento de los derechos humanos para todos y todas”. Además, habría que reconocer al Estado de Palestina como el miembro de pleno derecho número 194 de las Naciones Unidas.


“Hace casi 75 años que Palestina se dividió para crear el Estado de Israel. Sin embargo, el pueblo palestino sigue viviendo bajo el yugo de la ocupación israelí”.


“El actual proceso de paz se encuentra en un punto muerto, debido a la expansión de los asentamientos ilegales con el apoyo de decenas de empresas, lo cual reduce las probabilidades de que se logre una solución basada en dos Estados”.


“La ONU debe hacer que 2022 sea el año en que se reinicie un proceso de paz basado en los derechos humanos para todos y todas, se reconozca a Palestina como un Estado y se otorgue al pueblo palestino los derechos a la autodeterminación, al retorno y a la seguridad frente a los continuos delitos y violaciones perpetrados por los israelíes contra ellos”, concluyó Sharan Burrow.


 

 

 

S. E. Sr. Antonio Guterres

Secretario General de las Naciones Unidas

Secretaría de las Naciones Unidas

42nd Street,

Nueva York, Ny 10017

29 de noviembre de 2021

antonio.guterres@un.org

 

 

                                                                            29 de noviembre de 2021

En 2022 la ONU debería organizar una conferencia internacional de paz entre Israel y Palestina y actualizar su base de datos.

Su Excelencia:

Este año, un informe de la CSI ha resaltado la explotación que sufren los trabajadores palestinos debido a la expansión e intensificación de la ocupación y los asentamientos ilegales. En un año se conmemorará el 75º aniversario de la aprobación de la resolución 181 de las Naciones Unidas sobre la Partición de Palestina y la creación del Estado de Israel. Sin embargo, el pueblo palestino sigue viviendo bajo el yugo de la ocupación israelí y a merced de que Israel quiera o no sentarse a negociar sobre su futuro.

Hoy en día, el proceso de paz se encuentra en un punto muerto. Las negociaciones no lograron fijar los derechos humanos internacionales como la base para alcanzar una solución de dos Estados. Como reconocemos la actual deficiencia del proceso de paz en Oriente Medio y el estancamiento de las negociaciones, instamos a la ONU a que en 2022 vuelva a organizar una conferencia de paz internacional con el objetivo de lograr una iniciativa de paz que se centre, ante todo, en el cumplimiento de los derechos humanos para todos y todas. Para el pueblo palestino esto incluiría los derechos a la autodeterminación, al retorno y a la seguridad frente a los continuos delitos y violaciones perpetrados por los israelíes contra ellos. Ya es hora de reconocer a Palestina como un Estado soberano y autónomo y como el miembro de pleno derecho número 194 de las Naciones Unidas.

Asimismo, la obtención de beneficios por parte de empresas israelíes y corporaciones multinacionales solo es posible porque se impide el desarrollo económico de Palestina, se lleva a cabo la anexión de sus territorios y se saquean sus recursos naturales. En dicho contexto, la posibilidad de lograr una solución viable basada en dos Estados se va desvaneciendo a medida que se siguen expandiendo los asentamientos ilegales y tolerando que las empresas apoyen la expansión de dichos asentamientos y de su infraestructura.

La [nombre de su central sindical] ha acogido muy favorablemente la publicación de la base de datos de la ONU donde se detallan las 112 empresas que operan en asentamientos ilegales israelíes ubicados en tierras palestinas. Es importante recordar que el mandato estipulado en la resolución 31/36 incluía la actualización anual de la base de datos y recomendaba “que el Consejo de Derechos Humanos establezca un grupo de expertos independientes, con un mandato de duración determinada, para transmitir dichos datos directamente al consejo mediante un informe a tal efecto”. Agregar y borrar a las empresas de la tan esperada base de datos genera trabas e incentivos necesarios para que estas no se impliquen en la industria israelí de los asentamientos ilegales, con arreglo al mandato establecido por la resolución 31/36 del Consejo de Derechos Humanos.

Por tanto, actualizar anualmente la base de datos es fundamental para acabar con la complicidad empresarial en la prolongada ocupación israelí y las violaciones sistemáticas y generalizadas de los derechos humanos. Rogamos encarecidamente al Secretario General de la ONU que apoye plenamente al ACNUDH para que cumpla su mandato en su totalidad y actualice anualmente la base de datos de las Naciones Unidas y garantice la asignación de los recursos financieros necesarios.

Agradeciendo la atención que brinde a la presente, le saluda atentamente,

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CONCENTRACIÓN EN GIJÓN EN APOYO A ORGANIZACIONES CIVILES CRIMINALIZADAS POR EL SIONISMO


 

domingo, 28 de noviembre de 2021

REPORTAJE | Empresas y países que expolian los recursos naturales del Sáhara Occidental.

 ECSAHARAUI22 DE NOVIEMBRE, 2021

Estas explotaciones violan numerosas leyes internacionales. Hasta la misma ONU ha manifestado en numerosas resoluciones calificando estas actividades como ilegales y clandestinas realizadas con el aval de la comunidad internacional, impunemente, permitiendo a Marruecos enriquecerse a costa de los saharauis; que están en el paro, cobrando salarios indignos, en el exilio o sobreviviendo en los campamentos de refugiados de Tinduf.



Redacción y elaboración: Equipo ECS.

Madrid (ECS).- Para entender el conflicto saharaui en su totalidad, es preciso destacar la dimensión económica y cómo esta hace fluctuar las negociaciones y posicionamientos internacionales. El Sáhara Occidental reúne una serie de recursos naturales y geográficos cuya explotación económica genera importantes beneficios, de estos cabría resaltar: 

  • La mina Bucraa', contiene grandes reservas de fosfato.
  • Caladeros marítimos densamente ricos. 
  • Reservas de petróleo, gas, uranio y cobre.
  • Amplio espacio desértico para instalar parques eólicos y fotovoltaicos.
  • Por otra parte, de las negociaciones llevadas a cabo entre ambas partes, se desprende una postura marroquí tendente a orientar el centro de gravedad del conflicto hacia sus pérdidas y ganancias económicas y no conservarlo en su lugar correcto, que es en la soberanía del pueblo saharaui y su cuestión de descolonización. Con estos elementos a mano, se comprende mucho mejor el poder de influencia que posee el aspecto económico en la resolución del conflicto, constituyendo una pieza fundamental en la permanencia de las fuerzas de ocupación marroquíes, que posibilitan por otro lado el expolio que realizan distintas multinacionales, de las cuales la gran mayoría son españolas.

    Este continuo saqueo viola innumerables leyes internacionales, incluso la ONU ha emitido varias resoluciones en las que define estas actividades como ilegales, y que son realizadas con la complicidad de la comunidad internacional que permite el enriquecimiento de Marruecos a través de unos recursos cuya soberanía no le pertenece, siendo los saharauis en quien debiera revertir el beneficio económico por legitimidad.

    Las leyes comerciales de la Unión Europea prohíben expresamente cualquier propiedad o control extranjero sobre los recursos saharauis, así como el comercio con los productos provenientes de los territorios ocupados, sin embargo estas leyes no disponen de mecanismos que vigilen su estricto cumplimiento, máxime teniendo en cuenta la riqueza que alberga el Sáhara Occidental, por ello varias multinacionales españolas no aparecen aquí ya que usan un vacío legal mediante el cual financian filiales marroquíes para que expolien los recursos por ellas o bien crean empresas opacas.

    Llegados a este punto cabe señalar que, implícitamente, toda empresa o multinacional que opera en el Sáhara Occidental ocupado, reproduce la continuidad de la ocupación marroquí propiciando la represión sistemática contra los saharauis, y alargando la dura estancia de unos refugiados que viven en condiciones extremas en el desierto argelino. Dichas características las hacen parte indisoluble del proceso de consolidación y legitimación marroquí de la colonización militar, así como copartícipes directos en el sufrimiento del pueblo saharaui. Básicamente contribuyen a determinar el conflicto de forma unilateral mediante la lógica de la dominación, arrasando con todo tipo de derechos humanos, políticos, comerciales e internacionales.

    Como es sabido, Marruecos sigue adelante con su plan de explotación y expropiación de los recursos naturales del territorio del Sáhara Occidental, que ocupa por la fuerza desde finales 1975. Recursos como los fosfatos, la pesca, la agricultura, gas, hierro, cobre, uranio y ahora le sigue la búsqueda del petróleo y de energías renovables.

    Recursos que son vendidos en el mercado internacional por parte del Gobierno marroquí sin ningún tipo de escrúpulos. Consumidos la mayoría de ellos por toda la Unión Europea, Oceanía, Estados Unidos, Japón y algunos países de Medio Oriente y otros de Sudamérica.

    En el saqueo de los recursos naturales del Sáhara Occidental no todas las empresas que participan son marroquíes, la mayoría de ellas son extranjeras que disfrutan de un permiso de Marruecos, lo que les hace cómplices de la violencia represiva que lleva el régimen marroquí en el Sáhara Occidental. Cabe destacar que han habido algunas empresas que tras denuncias del Polisario y de varias organizaciones, han cesado su actividad alegando que ''antes de la economía, está lo ético y moral y hay que respetar la legalidad internacional.''

    La siguiente lista muestra algunas de las empresas que actualmente tienen un contrato o han mantenido alguno con Marruecos, llevando a cabo su actividad extractiva en territorio saharaui. El ránking de empresas lo lideran las españolas con una participación considerable (14), seguidos de Francia (9) y después Marruecos (6).


    1. Sinofert. (China)
    2. Coromandel International. (India)
    3. Nutrien LTD (Canadá)
    4. Almstom (Francia)

    5. Engie (Francia)
    6. San Leon Energy (Irlanda)
    7. Gamesa. (España)
    8. Kosmos Energy. (EE.UU)
    9. TOTAL. (Francia)
    10. ONHYM. (Marruecos)
    11. LongreachOil and Gas Ventures. (Australia)
    12. Azura. (Francia)
    13. Idyl. (Francia)
    14. Siemens. (Alemania)
    15. Deutsche Bank. (Alemania)
    16. Acciona. (España)
    17. Abengoa. (España)
    18. AlstomWind. (Francia)
    19. Kerr-McGee. (EE.UU)
    20. OCP Maroc. (Marruecos)
    21. Atwood Oceeanics. (EE.UU)
    22. FMC Foret. (España) 
    23. Jealsa. (España)
    24. EuroPacífico. (España)
    25. Granintra. (España)
    26. IsoFotón. (España)
    27. ISUSA. (Uruguay)
    28. Metalex. (México)
    29. Deval Shipping and Trading. (Turquía)
    30. Ership. (España)
    31. Pequiven. (Venezuela)
    32. Gildo. (España)
    33. NETMAR. (España)
    34. Tamoil Sakia. (Libia)
    35. Meripul. (España)
    36. PotashCorp. (Canadá)
    37. Derhem Seafood. (Marruecos)
    38. King Pesca. (España)
    39. TROULO. (España)
    40. Lifosa. (Lituania)
    41. TGS-Nopec. (Noruega)
    42. EDF Energies. (Francia)
    43. VESTAS. (Dinamarca)
    44. Theolia. (Francia)
    45. ACWA Power. (Arabía Saudí)
    46. FuGro. (Holanda)
    47. Thor Marino. (Dinamarca)
    48. Wessex Exploration. (Reino Unido)
    49. Cairn Energy. (Escocia)
    50. Island Oil. (Chipre)
    51. Terra Sola Groupe AG. (Bahráin)
    52. Innophos. (EE.UU)
    53. Tripoliven. (Venezuela)
    54. Agrium Incorporated. (Canadá)
    55. Incitec Pivot. (Australia)
    56. Ballance Agri-Nutrients. (Nueva Zelanda)
    57. Nareva Holding. (Marruecos)
    58. GDF Suez. (Francia)
    59. Pura Vida Energy. (Australia)
    60. Freeport-McMoRan. (EE.UU)
    61. TAQA. (Emiratos Árabes Unidos)
    62. KFW Bank. (Alemania)
    63. BEI. (Europa)
    64. DLM Maroc. (Marruecos)
    65. Mitsui & Co. (Japón)
    66. Enel Green Power. (Italia)
    67. General Electric. (EE.UU)
    68. Al-Ajial Funds. (Marruecos)
    69. International Power Ltd. (Reino Unido)
    70. Cognis. (Alemania) 

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