16 de febrero de 2021
Carta abierta a M. Dupond Moretti, Ministro de justicia francés.
Un grupo de intelectuales y artistas franceses han enviado una carta pública a Eric Dupont-Moretti, su ministro de Justicia, como respuesta a la circular del ministerio pidiendo a los procuradores y a los presidentes de tribunales de justicia :
1. que no respeten la sentencia de la Corte Europea de los Derechos Humanos, (que ha legitimado en junio pasado las llamadas al boicot a Israel y de sus productos por motivos políticos) y seguir condenando a los militantes que promuevan el boicot a los productos israelíes por “provocación a la discriminación hacia una nación”.
2. y que castiguen a los que promuevan el boicot con una estancia “Shoah”, organizada por el Memorial de la Shoah, en el antiguo campo de concentración de Struthof (Alsacia) o en el campo de las Millas (Aix en Provence).
CARTA ABIERTA A M. ERIC DUPOND-MORETTI, MINISTRO DE JUSTICIA
Señor Ministro de Justicia
Ha difundido usted recientemente una circular a la atención de todos los procuradores y presidentes de los tribunales en la que les ha pedido que condenen las llamadas al boicot de los productos israelíes que según usted corresponden a una “provocación a la discriminación hacia una nación”, y esto a pesar de la sentencia del 11 de junio de 2020 de la Corte Europea de los Derechos Humanos.
Una sentencia que ha legitimado claramente el llamamiento al boicot a un Estado y a sus productos por razones políticas, y ha detallado las razones de su legalidad a la vista del artículo 10 de la Corte europea de derechos humanos (CEDH), que lo considera un modo de expresión de protesta y que prohíbe toda restricción de la libertad de expresión en este caso. Incluso ha condenado al Estado francés a pagar más de 100.000 euros por daños e intereses acumulados de los militantes de Mulhose que habían sido sancionados por su apoyo al boicot a un régimen de apartheid, y a los productos que exporta.
Algunas precauciones de redacción contenidas en vuestra circular (donde usted aconseja a los magistrados especialmente afinar la redacción, “motivar mejor” sus condenas) esconden mal el hecho de que usted vuelva a la carga intentando asimilar el boicot a Israel al antisemitismo, como le reclaman grupos de presión pro-israelíes.
Y usted aporta la prueba recomendando a los magistrados, en el párrafo sobre los castigos, obligar a los que promuevan el boicot (“salvo comportamiento reiterado”) ¡¡ a efectuar una “estancia Shoah”!!
No satisfecho con no tener en cuenta la independencia de la magistratura, dirigiéndose usted a los presidentes de los tribunales, ni los juicios de la Corte europea de derechos humanos (CEDH) que Francia tiene la obligación de acatar como miembro de la Unión Europea, y con mayor motivo del Consejo de Europa, ¿viene usted, señor ministro, cuando se quiere socorrer al pueblo palestino bajo ocupación, colonizado, encerrado en guetos, martirizado, a hablarnos de las persecuciones sufridas por los judíos?
Esto es un paso absolutamente abyecto , es un insulto.
Demuestra usted con esto, no solamente su desprecio por un pueblo oprimido, sino también por las mujeres y los hombres de conciencia que tienen que recurrir, como hizo Gandhi, Martin Luther King o Mandela, a una campaña de boicot, porque nuestros gobernantes no muestran ningún respeto por las resoluciones y convenciones que han firmado en materia de derechos humanos y de derecho internacional cuando se trata de Israel.
Ignora usted por otra parte que son numerosos los judíos dentro del movimiento internacional BDS (Boicot, Desinversión, y Sanciones) y entre ellos hijos y nietos de deportados que podrían daros algunas lecciones en materia de genocidio de los judíos, incluso en Francia, esta Francia en la que en 1941, un solo magistrado rechazó prestar juramento de fidelidad a Pétain (los magistrados judíos habían sido ya apartados). Y muy poca gente recuerda desgraciadamente el nombre de Paul Didier, casi nunca citado en los homenajes que se rinden a los que se resistieron a la propaganda reinante en aquellos años.
El Estado francés ya ha caído bastante bajo acosando a personalidades como Stphane Hessel, Edgar Morin o Daniel Mermet por sus críticas a la política israelí. Si vivieran en Francia pasaría sin duda lo mismo con Noam Chosmsky, Norman Finkilstein, Ken Loach. Roger Waters, Desmond Tutu, Ronnie Kasrils y tantos otros que llaman al boicot a Israel y son calificados de antisemitas por Israel.
¿Piensa usted que una “estancia Shoah” podría venirles bien a los israelíes judíos que, también ellos, llaman al boicot, como el historiador Ilan Pappé, el periodista Gedeon Levy, o incluso la presidenta de la asociación israelí de Médicos por los Derechos Humanos, Ruchama Marton?
¿Qué haría usted con el antiguo presidente del parlamento israelí, Avraham Burg, que se avergüenza de la política israelí hasta el punto que ha pedido que le sea retirada su “nacionalidad judía” ?
¿A qué condenaría a los jóvenes israelíes judíos, esos «refuzniks», que prefieren ir a prisión antes que servir en un ejército de ocupación?
Señor Dupond-Moretti, sería un grave error pensar que todos los judíos salen del mismo molde, y que todos ellos apoyan un Estado que comete crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad únicamente porque se defina como judío. El que se les niegue la voz y la palabra no significa que los judíos no sepan ver la injusticia y la opresión cuando existan.
Son muchos afortunadamente, cada vez más numerosos, en Europa, en los Estados Unidos, e incluso en Israel, los que se levantan contra la ocupación, la colonización israelí y su cortejo de atrocidades, como los bombardeos de poblaciones civiles, las demoliciones de escuelas y de clínicas, la detención y la tortura de niños, los guetos privados de electricidad, de agua potable, de servicios y de alimentos, como en Gaza.
¿Se atreve usted a hablar de “discriminación hacia una nación”, cuando se le niega a un pueblo entero sus derechos más fundamentales, incluyendo su libertad de movimiento desde hace decenios, por una brutal ocupación que viola permanentemente los derechos humanos y el derecho internacional, reviviendo en nuestros días la noción de raza superior?
Señor Dupond-Moretti, atención, no contribuya usted al desarrollo del antisemitismo en Francia colocando a Israel por encima de las leyes, garantizándole la impunidad, enviando a los magistrados una circular en la que sólo se refiere al boicot a Israel, y de ningún otro país más, sometiéndose usted a la voluntad de un lobby pro-israelí sin escrúpulos, que anima en Francia los comportamientos violentos de la extrema derecha de la “Liga de Defensa Judía” difundiendo la idea malsana, y al final antisemita, de que los judíos forman una categoría de personas aparte, por encima de las leyes.
En lugar de querer amordazarnos por pedir sanciones contra Israel tratando de concretar su hipócrita expresión de “Nunca más", debería usted comprender, Señor Ministro, que las acciones BDS, que reúnen personas de todas las confesiones (también judías) y ateas, son precisamente las que sirven para luchar contra el racismo, incluido el antisemitismo.
Nota
[1] La Convención Europea de Derechos Humanos obliga a los estados adheridos a adaptar su legislación a las sentencias definitivas de la Corte Europea de Derechos Humanos en todos aquellos litigios que les afecten (Conv. EDH, art. 46, 1°). Es obligatoria la ejecución de las sentencias. Las jurisdicciones nacionales deben integrar la jurisprudencia europea en su interpretación. Pero como no existe ninguna ley en Francia que prohiba el llamamiento al boicot de un estado por razones políticas, Francia no ha tenido que modificar su legislación hasta el momento.
Firmantes :
Saïd Bouamama (sociólogo y militante del FUIQP)
Janos Borovi (militante antiracista ; superviviente de la Shoah. Su abuela fue fusilada en 1944 en Budapest)
Sohil Budjellal (abogado)
Jacques-Marie Bourget (periodista escritor)
Alain Brossat (universitario)
François Burgat (politólogo, Aix en Provence)
Dominique Cochain (abogado)
Christine Delphy (socióloga, feminista)
Christophe Denantes (médico anestesista, Hôpital Avicenne Bobigny)
Georges Yoram Federmann (psiquiatra gymnopédiste, Strasbourg)
Mgr Jacques Gaillot (obispo de Partenia)
Claire Gaillard-Strauss (biologista, investigadora en el CNRS)
François Gèze (editor)
Sefen Guez Guez (abogado)
La Troupe artistique JOLIE MOME
HK (artista, músico, compositor)
Sarah Katz (participante en la flotilla de la libertad de 2018)
Olivier Le Cour Grandmaison (universitario)
Adrien Nicolas (militante anti-guerra)
Roland Nurier (realizador)
SIDI WACHO (artistas)
Pierre Stambul (hijo de un miembro del grupo Manouchian, deportado a Buchenwald)
Odile Tobner (escritora y ensayista)
Bérenger Tourné (abogado)
Françoise Verges (politóloga, feminista decolonial)
Olivia Zémor (militante antiracista, por una Palestina libre)
No hay comentarios:
Publicar un comentario