Las organizaciones internacionales alertan sobre la vulnerabilidad de los refugiados y desplazados en campos.
Una mujer, fuera del perímetro del campo de refugiados de Moria, en la isla griega de Lesbos, el 11 de marzo.AGGELOS BARAI / AP
Madrid / Estambul / Berlín - 20 MAR 2020 - 21:18CET
Lavarse las manos con frecuencia y mantener la distancia social son las dos recomendaciones básicas en todo el mundo para protegerse del coronavirus. Pero llevarlas a la práctica en lugares como Moria, el mayor campo de refugiados de la Unión Europea, es casi imposible. En él viven, en medio de la suciedad y en tiendas de campaña, unas 20.000 personas alrededor de un espacio que se concibió para unas 3.000.Más....
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