“Sudáfrica entiende la historia del apartheid para apoyar a los oprimidos, mientras Israel usa el Holocausto como licencia para matar”
El médico oftalmólogo palestino Mohamed Safa, escritor y autor de “La Segunda Nakba Palestina”, ofreció este viernes conferencia en Mieres titulada “Un año del genocidio de Palestina. 76 años de colonización israelí”. En el acto, organizado por el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe, Asturies con Palestina, la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo y el Ayuntamiento de Mieres, abordó las devastadoras consecuencias del genocidio perpetrado en el último año por el Estado de Israel. Una situación que se ha tornado aún más preocupante para los palestinos, ya que el presidente Donald Trump, tras reunirse esta semana con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, se comprometió públicamente a hacerse cargo de Gaza a largo plazo, reafirmando su intención de expulsar a los palestinos de la zona y abandonando de facto la solución de los dos estados.
Lo están viviendo con total claridad. Ya no es solo el genocidio, ahora es la expulsión, y no de manera escondida ni oscura, sino de forma abierta. Esto no lo entienden. Se nota que Trump sabe de negocios, pero no entiende ni reconoce la historia de un pueblo vinculado a su tierra. En el Líbano, en 1982, la OLP fue expulsada y enviada a Túnez y otros países. Pensaban que, al alejar la resistencia palestina, aliviarían la presión en la frontera con Israel. Pero, apenas tres años después, los palestinos regresaron con más fuerza, y cuando estalló la primera Intifada en 1987, volvieron con una mayor conciencia de ser un pueblo en lucha contra la ocupación. Hemos tenido muchas derrotas, hemos sufrido, el dolor es inmenso y la herida es profunda, pero estamos acostumbrados a esto. Sabemos que nuestra obligación es volver a levantarnos. Aunque el momento internacional no sea favorable para nosotros, tenemos a un pueblo consciente y vinculado a su tierra. Lo que hacen los palestinos, al regresar a vivir entre los escombros de sus casas destruidas, muestra un compromiso inquebrantable. Trump no lo entiende. Tiene una mentalidad de negocio y cree que esto es solo una cuestión de ventas. Llevamos años luchando para mantener nuestra vinculación con esta tierra, y aunque hayamos emigrado, Palestina sigue con nosotros. La llevamos en el corazón, en el pensamiento y en nuestra actitud.
¿Cree que Europa o España tomarán una postura firme frente a lo que está sucediendo?
Espero mucho más de Europa. Actualmente, la postura es con perfil bajo, pero necesitamos que asuman una posición firme. No se puede aceptar la limpieza étnica en pleno siglo XXI. No podemos retroceder al siglo XIX, a esa mentalidad. La estructura jurídica construida después de la Segunda Guerra Mundial, todo lo que se logró en Ginebra y el respeto por el derecho internacional, está siendo derrumbada. Europa debe mantener esa luz moral, esa defensa de la igualdad, el derecho y la justicia, y no permitir que la extrema derecha prevalezca.
Beatriz Coto, Mohamed Safa, Rocío Antela y Elio Castaño.
¿Cree que Europa podría mantener un perfil bajo y esto podría generar una brecha más grande entre Occidente y los países árabes?
Si los países árabes, liderados por sus gobiernos, representan los intereses y la inquietud de la sociedad árabe, deben adoptar una postura mucho más firme frente a EE.UU. Y los países europeos que lo apoyan. Apelo a que los países árabes y los países europeos, si no lo hacen por justicia, lo hagan por egoísmo. Porque las ambiciones israelíes no se limitan a las fronteras de Palestina. Los países árabes deben ser conscientes de que su seguridad nacional depende de la defensa del territorio palestino.
¿Tiene confianza en que esta situación se pueda reconducir de alguna forma?
Mi confianza está en nuestro pueblo. La única confianza que tengo es en nuestro pueblo. Aunque sea difícil, nosotros seguimos luchando y vamos a seguir luchando. No vamos a renunciar a nuestros derechos. Aunque haya obstáculos, seguimos adelante. La sociedad europea también se ha movilizado en este genocidio y en defensa de valores fundamentales como la igualdad. A través de este compromiso, nosotros seguimos luchando.
¿Mantiene la resistencia como esencia de la identidad palestina?
Sí, nuestra lucha continúa. No renunciamos a nuestros derechos, y estamos dispuestos a seguir luchando. A lo largo de los años, hemos enfrentado derrotas, pero siempre hemos seguido adelante. La resistencia es parte de nuestra identidad, es lo que nos define y lo que nos mantiene firmes en la lucha.
En realidad, la mayoría de los países, aunque de forma tibia están mostrando rechazo a esta medida.
Eso parece, pero hay un país que destacaría por el simbolismo que tiene. Sudáfrica se opone al genocidio y al plan de limpieza étnica de Trump. Sudáfrica ha comprendido la historia del apartheid como una lección para apoyar a los demás pueblos oprimidos, mientras que Israel ha usado la memoria del Holocausto como una licencia para matar. Esto es importante porque ha habido dos hechos terribles en el siglo XX: el sistema racista instalado en Sudáfrica durante muchos años y el Holocausto judío realizado por los nazis. Sin embargo, Sudáfrica ha aprendido del sufrimiento de otros y se ha alineado con la causa palestina. Este simbolismo es fundamental. La memoria es importante, pero lo que realmente importa es cómo se usa esa memoria. Sudáfrica ha utilizado la memoria para comprender el dolor de los demás y ha tomado una postura valiente, mientras que Israel la usa como excusa para justificar la opresión
No hay comentarios:
Publicar un comentario