DECLARACIÓN SOBRE EL ÚLTIMO ATAQUE ISRAELÍ CONTRA PALESTINOS EN NABLÚS
ECCP
La Coordinadora Europea de Comités y Asociaciones por Palestina (CECP) condena enérgicamente el último asalto de Israel contra palestinos en Nablus.
Alrededor de las 10.15 de la mañana del 22 de febrero de 2023, el ejército israelí comenzó su incursión en la ciudad cisjordana de Nablus, en el Territorio Palestino Ocupado. Este ataque duró más de cuatro horas y se desarrolló en las estrechas calles de la ciudad vieja, a menudo abarrotadas de civiles, familias y gente de compras.
Este ataque militar se basó en información en tiempo real -se cree que era una publicación en Facebook geolocalizada realizada por uno de los militantes- dirigida a varios grupos militantes palestinos, como la Guarida de los Leones, la Brigada de Naplusa y la Brigada de Balata, con base en un campo de refugiados vecino.
Como se puede leer en los muros acribillados a balazos de la ciudad vieja de Naplusa, esta operación fue la más mortífera en más de 20 años; murieron al menos 11 palestinos, entre ellos un niño de 16 años y un hombre de 72. El número de palestinos muertos es uno más que el de la incursión militar israelí que tuvo lugar el mes pasado en Yenín, que fue la más mortífera en Cisjordania desde 2005.
Además, al menos 102 personas resultaron heridas, 82 de ellas por impactos de munición real: seis de ellas se encuentran actualmente en estado crítico y un hombre de 66 años que sufría inhalación de gases murió en el hospital tras la incursión.
Vídeos palestinos publicados en varias redes sociales muestran a jóvenes, aparentemente desarmados, recibiendo disparos y huyendo por las calles de Nablus. Otra publicación en Twitter muestra imágenes espeluznantes en las que se ve un vehículo militar arrollando a una multitud de palestinos en Nablús. Por si fuera poco, y como ya se vio en el ataque de Jenín, los mensajes de Twitter muestran al ejército israelí impidiendo que las ambulancias y los servicios médicos lleguen hasta los heridos.
La tendencia por la que Israel está multiplicando sus operaciones militares y matanzas de palestinos -con las incursiones militares en Yenín y Jericó a principios de año, junto con un preocupante aumento de la violencia de los colonos en todo el territorio palestino ocupado- significa que el nivel de violencia alcanzado este año es el más alto en décadas.
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU ha declarado que la intensificación de las incursiones israelíes suscita "serias preocupaciones por el uso excesivo de la fuerza" y ha pedido que se investiguen las operaciones mortíferas. Según el Ministerio de Sanidad palestino, desde principios de 2023, soldados y colonos israelíes han matado al menos a 60 palestinos, entre militantes y civiles.
Esto va de la mano de un aumento de las expulsiones y demoliciones de viviendas -sobre todo el caso de Masafer Yatta- y de una expansión de los asentamientos que cada vez es más de iure, lo que da testimonio de la agenda colonial de los colonos sin caretas del gobierno israelí de extrema derecha.
De hecho, el jueves 16 de febrero de 2023, Estados Unidos dijo estar "profundamente consternado" por los planes expansionistas de Israel, que incluyen la construcción de miles de edificios adicionales en nuevos asentamientos. El secretario de prensa de la Casa Blanca declaró que "los asentamientos, la construcción y la expansión en el corazón de Cisjordania, que incluyen la legalización de puestos de avanzada, crean hechos sobre el terreno que socavan la solución de dos Estados."
El aumento de la violencia tanto estatal como de los colonos, la anexión de facto y cada vez más de iure de tierras palestinas, la demolición de estructuras palestinas y la expansión de los asentamientos israelíes son extremadamente preocupantes y exigen una acción urgente por parte de la UE y de los funcionarios europeos.
La falta de reacción de la UE y de los gobiernos europeos y la continuación de sus vínculos incondicionales y su cooperación con el Estado de apartheid israelí contradicen sus valores fundamentales y convierten a la UE y a Europa en cómplices de las reiteradas violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional por parte de Israel.
Exigimos que la UE y los gobiernos europeos tomen medidas urgentes y suspendan inmediatamente los acuerdos bilaterales con Israel, incluido Horizonte Europa;
prohíban todas las transacciones económicas con los asentamientos ilegales israelíes;
impongan sanciones a Israel por sus flagrantes violaciones del derecho internacional y de los derechos humanos, incluida la imposición de un embargo militar bidireccional a Israel.
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