Además de la manifestación, la plataforma a favor del pueblo palestino repartirá tarjetas rojas para que se exhiban contra Israel durante el partido en El Molinón y, concretamente, en los minutos 17 y 48. "En el minuto 17 porque en 1917 se produjo un acuerdo entre países ocupantes para cederles a los sionistas terrenos; y en el 48 porque es la conmemoración dolorosa de la limpieza étnica del estado de Israel contra el estado palestino", explican los organizadores de la protesta, que recalcan que "una selección de fútbol absoluta es la representante en el terreno deportivo del estado y es corresponsable de las violaciones que se hacen al derecho al fútbol y el deporte".
Los activistas anti Israel recuerdan nombres "de jugadores y entrenadores palestinos encarcelados sin juicio", así como "equipos israelíes de fútbol matriculados en las colonias ilegales de los territorios ocupados de Palestina". Igualmente, acusaron a Israel de bombardear a niños palestinos mientras juegan al fútbol en la playa. "¿Qué pensaríamos si a cinco niños que juegan en la playa de San Lorenzo al fútbol los bombardearan de forma inmisericorde y los mataran?", señaló Ángel Alonso. Miguel Ángel San Miguel, por su parte, recalcó que "no es lo mismo judío que sionista", rechazando que sus protestas sean antisemitas.
De nuevo, desde el colectivo proisraelí ACOM tienen una visión frontalmente opuesta. "Al final lo que quieren es el ostracismo y la exclusión del único estado judío. Y si eso se lleva al ámbito del deporte, donde árabes y judíos juegan juntos en el equipo nacional de Israel, les da lo mismo. Lo que les importa simplemente es excluir de la vida internacional a Israel, porque buscan la destrucción del estado judío", recalca Ángel Mas, que incide en que "en el equipo nacional israelí ha habido capitanes árabes". Respecto a las otras acusaciones, señala que "Israel no es responsable de las ligas en territorios que no controla y en la liga israelí juegan todos al fútbol: árabes, judíos y cristianos y no hay ningún tipo de discriminación, todos son ciudadanos israelíes y no son discriminados por origen étnico. Otra cosa es que un señor se disfrazaba de jugador de fútbol y se dedicaba a ser terrorista, y eso no cuela", sentencia.
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