La destrucción israelí de la ciudad de Gaza incluye la sede del PCHR

 La destrucción israelí de la ciudad de Gaza incluye la sede del PCHR

Israel derribó la torre Al-Roya de 12 pisos en la Ciudad de Gaza, el 8 de septiembre, que acogía las oficinas de la sede principal en la Franja del Centro Palestino de Derechos Humanos (PHCR, por sus siglas en inglés), un destacado grupo que promueve la rendición de cuentas por los crímenes que Israel comete sobre la población palestina, pocos días después de que la administración Trump sancionara a la organización por su participación en un caso de la Corte Penal Internacional (CPI) contra funcionarios israelíes.

El Comité de Solidaridad con la Causa Árabe, mediante su Convenio con la Junta del Principado de Asturias, está ayudando económicamente al PCHR en los últimos años.

La destrucción de la ciudad de Gaza por parte israelí, de esta forma, continúa, ante la pasividad de la comunidad internacional y, destacadamente, por parte de la Unión Europea.

El director del PCHR, Raji Sourani, a propuesta del CSCA, obtuvo el Premio internacional de defensa de los derechos humanos de la Asociación pro Derechos Humanos de España en el año 2022.

Raji Sourani forma parte del equipo de abogados de la República de Sudáfrica en la cuestión de afectación del tratado sobre genocidio por parte de Israel ante la Corte Penal Internacional de La Haya. 

Sharon Zhang, de The Guardian, en su crónica dice, "El lunes [8 de septiembre], el portavoz militar israelí Avichay Adraee advirtió en una publicación en las redes sociales que las fuerzas israelíes atacarían la torre Al-Roya en la ciudad de Gaza. Adraee publicó una imagen en la que se destacaba el edificio.

La oficina del Centro Palestino para los Derechos Humanos (PCHR) estaba situada en la última planta y ya ha sido «bombardeada y gravemente dañada», además de ser utilizada por las fuerzas israelíes como base militar. Las otras dos oficinas del grupo, en Jan Yunis y Jabalia, ya habían sido completamente destruidas por los ataques israelíes, según informó el PCHR.

Junto con la oficina del PCHR, la torre alberga «oficinas de medios de comunicación, clínicas médicas, instalaciones deportivas y otras oficinas y empresas civiles», según el grupo.

Apenas unas horas después de las palabras del portavoz israelí, Israel bombardeó el edificio, derribándolo por completo. El edificio estaba situado junto a una zona llena de tiendas de campaña que albergaban a palestinos desplazados. Según los informes, una persona murió en el ataque.

«La sede central del PCHR en la ciudad de Gaza, situada en la torre Al-Roya, acaba de ser completamente destruida por los aviones de combate de las Fuerzas de Defensa de Israel, como parte de los continuos ataques sistemáticos de Israel contra los edificios altos de la ciudad, en otro crimen de guerra cometido contra el pueblo palestino y sus instituciones», afirmó el PCHR en una publicación tras el ataque.

De hecho, Israel ha atacado numerosos edificios altos en la ciudad de Gaza, muchos de ellos residenciales o civiles, en las últimas semanas de su intensificada incursión en la populosa región. Los residentes han descrito que solo han tenido unos minutos para evacuar las zonas amenazadas por Israel.

El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, amenazó con más violencia en una publicación en las redes sociales el lunes, cuando la cifra oficial de muertos se acerca a las 65 000 personas, entre ellas casi 19 500 niños.

«Un poderoso huracán azotará hoy los cielos de la ciudad de Gaza», afirmó. «Liberen a los rehenes y depongan las armas, o Gaza será destruida y ustedes serán aniquilados».

El PCHR ha sido crucial para documentar las atrocidades de Israel desde el terreno en medio del genocidio. Justo el día del ataque, el grupo publicó un informe en el que documentaba el asedio de Israel a la ciudad de Gaza, señalando los bombardeos y asesinatos israelíes y recogiendo testimonios de palestinos que habían presenciado los ataques.

El ataque se produce solo cuatro días después de que el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, anunciara que Estados Unidos impondría sanciones al PCHR y a otras dos importantes organizaciones palestinas de derechos humanos, Al-Haq y Al-Mezan Center for Human Rights. Rubio citó la participación de estas organizaciones en «los esfuerzos de la Corte Penal Internacional (CPI) por investigar, arrestar, detener o procesar a ciudadanos israelíes sin el consentimiento de Israel».

Al-Mezan condenó el ataque. «Pocos días después de ser sancionados injustamente por Estados Unidos por nuestra legítima labor de rendición de cuentas, Israel bombardeó y destruyó el edificio que albergaba la sede del PCHR. Total solidaridad con nuestros colegas».

Recientemente, Raji Sourani, registró junto al abogado Rodolfo N. Yanzón una demanda en Argentina contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y otras autoridades israelíes, utilizando las normas de jurisdicción universal existentes en dicho país, por su participación en la presunta comisión de graves delitos.

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