Un año después del fallo de la CIJ,
expertos de la ONU instan a los Estados a afrontar la inacción ante la
ocupación ilegal de Israel
Oficina del Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos, 21 de septiembre de 2025
En el aniversario de la adopción de
la resolución de la Asamblea General tras el fallo
de la CIJ sobre Palestina, expertos de la ONU* instaron a los Estados Miembros
a cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional, adoptar
medidas concretas para detener los ataques de Israel contra los palestinos y
poner fin a su ocupación ilegal. Emitieron la siguiente declaración conjunta:
Nos consterna que, a pesar del abrumador
apoyo en la Asamblea General de la ONU a la resolución basada en la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia
de julio de 2024, que declaró ilegal la presencia continua de Israel en el
Territorio Ocupado y afirmó que todos los Estados están obligados a no
reconocer, ayudar ni asistir la ocupación que dura décadas, la situación actual
sigue siendo apocalíptica, y el pueblo palestino enfrenta una amenaza
existencial.
La resolución estableció responsabilidades
claras para terceros Estados y organizaciones internacionales, incluido el
sistema de las Naciones Unidas, en relación con la ocupación ilegal de Israel.
Exhortó a Israel a cumplir con el derecho internacional mediante la retirada de
sus fuerzas militares, el cese de toda nueva actividad de asentamiento, la
evacuación de los colonos de los territorios ocupados, el desmantelamiento de
secciones del muro de separación construidas en Cisjordania y Jerusalén
Oriental, y el fin de la explotación de los recursos naturales palestinos. La
resolución aclaró que cualquier Estado que continúe ayudando, asistiendo o
contribuyendo de cualquier otra forma a la ocupación y sus violaciones conexas
corre el riesgo de infringir el derecho internacional y convertirse en cómplice
de crímenes internacionales.
El primer aniversario de la resolución
llega en el momento más sombrío. Setecientos días de asalto militar contra la
Franja de Gaza y el resto del territorio palestino ocupado han causado la
muerte y herido al menos a 230.000 palestinos. 2,1 millones de civiles en el
enclave asediado se mueren de hambre. Toda Gaza ha quedado reducida a escombros
y toda la población ha sido desplazada por la fuerza, a menudo en múltiples
ocasiones. La inacción de la mayoría de los Estados Miembros a la hora de
actuar con decisión expone la profunda erosión del sistema multilateral, que se
ha convertido en el daño colateral del genocidio de Gaza.
En los últimos meses, la naturaleza
colectiva y de gran alcance del genocidio en curso se ha vuelto innegable,
marcado por asesinatos en masa, sufrimiento indescriptible y destrucción a gran
escala. La violencia ya no se limita a Gaza; se está extendiendo a Cisjordania,
donde el desplazamiento masivo forzado y los brutales ataques de colonos
armados no pueden desestimarse como acciones de unos pocos funcionarios
corruptos, sino que cuentan con la complicidad del Estado en todos los niveles.
Todos los poderes del Estado de Israel —su Ejecutivo, Parlamento y Tribunales—
han fracasado en contener o remediar este abuso de poder. En cambio, han
perpetuado y agravado la catástrofe, construida —como en todos los genocidios
anteriores— sobre la deshumanización sistemática de todo un pueblo.
Ya pasó el momento de detener este
genocidio. Nos consterna que los Estados Miembros no se hayan tomado en serio
la obligación de prevenirlo. La continua impunidad de Israel y su incapacidad
para detener los monstruosos crímenes cometidos contra los palestinos han
sentado las bases para nuevas agresiones israelíes contra otros países de la
región. Debería haberse detenido antes de la invasión de Rafah; antes de que
Israel atacara varios países de Oriente Medio y el norte de África.
La Comisión Internacional Independiente de
Investigación de las Naciones Unidas sobre el Territorio Palestino Ocupado,
incluida Jerusalén Oriental, e Israel ha concluido en un informe publicado esta semana que Israel ha
cometido genocidio contra los palestinos en la Franja de Gaza.
Sin embargo, en lugar de actuar, un mundo
que ahora es plenamente consciente del horror del genocidio y de la injusticia
de la ocupación y el apartheid se enfrenta al silencio o, peor aún, a la
justificación de un pequeño pero poderoso grupo de Estados que siguen
permitiendo los ataques de Israel a Gaza, al derecho internacional, al sistema
multilateral y a la humanidad misma.
En este momento desgarrador, recordamos a
la comunidad internacional las recomendaciones que destacamos en una
declaración emitida el 18 de septiembre de 2024 y recordamos
el Documento de Posición emitido por la Comisión
Internacional de Investigación de las Naciones Unidas sobre el Territorio
Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental e Israel.
Para cumplir con la Opinión Consultiva, la
Corte Internacional de Justicia afirmó la necesidad de romper vínculos con la
ocupación ilegal. Esto significa que no se pueden eludir las sanciones, ni
siquiera contra Israel, ni contra individuos y empresas que negocian con un
régimen genocida.
·
Hay que
eliminar a Israel de las Naciones Unidas;
·
Es necesario
cortar las relaciones económicas y militares, incluso impidiendo las relaciones
comerciales o de inversión y los vínculos culturales con actores israelíes que
promuevan la ocupación o se beneficien de ella;
·
Los Estados
no deben reconocer ni revertir ningún reconocimiento de cambios en el estatus
del territorio palestino ocupado;
·
Se debe
imponer un embargo total de armas a Israel, deteniendo todos los acuerdos,
importaciones, exportaciones y transferencias de armas, incluidos los artículos
de doble uso que podrían utilizarse contra la población palestina bajo
ocupación, de acuerdo con el recordatorio emitido a todos los Estados en el
caso Nicaragua contra Alemania; y
·
Los Estados
deben prevenir, investigar y procesar a todos los ciudadanos y visitantes en su
jurisdicción que presten o hayan prestado servicio en o para el ejército
israelí y hayan contribuido al régimen de ocupación, apartheid y genocidio,
incluso mediante la compra de propiedades en territorio ocupado.
Cuanto más tiempo mantengan los Estados
estos vínculos, más consolidarán la normalización y legitimarán la ilegalidad,
al tiempo que fomentan la impunidad y se hacen cómplices de crímenes
internacionales”.
·
Francesca
Albanese, Relatora Especial sobre la situación de los derechos
humanos en el territorio palestino ocupado desde 1967
·
George
Katrougalos ,
Experto independiente sobre la
promoción de un orden internacional democrático y equitativo
·
Balakrishnan
Rajagopal ,
Relator Especial sobre el derecho a una vivienda adecuada
·
Michael
Fakhri ,
Relator Especial sobre el derecho a la alimentación
·
Alexandra
Xanthaki ,
Relatora Especial sobre los
derechos culturales
·
Tomoya
Obokata ,
Relator Especial sobre las formas contemporáneas de la
esclavitud, incluidas sus causas y consecuencias
·
Morris
Tidball-Binz ,
Relator Especial sobre ejecuciones extrajudiciales,
sumarias o arbitrarias
·
Olivier De
Schutter ,
Relator Especial sobre la extrema pobreza y los derechos
humanos;
·
Nicolas
Levrat ,
Relator Especial sobre cuestiones
de las minorías
·
Astrid
Puentes Riaño , Relatora Especial sobre el
derecho humano a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible
·
Paula Gaviria
Betancur ,
Relatora Especial sobre los
derechos humanos de los desplazados internos
·
Pedro Arrojo
Agudo ,
Relator Especial sobre los derechos
humanos al agua potable y el saneamiento
·
Tlaleng
Mofokeng ,
Relatora Especial de las Naciones
Unidas sobre el derecho de toda persona al disfrute del más alto nivel posible
de salud física y mental
·
Surya Deva , Relator Especial sobre el derecho
al desarrollo
·
Gina Romero , Relatora Especial sobre los
derechos a la libertad de reunión pacífica y de asociación;
·
Pichamon
Yeophantong (Presidente), Damilola Olawuyi (Vicepresidente), Fernanda
Hopenhaym, Lyra Jakulevičienė y Robert McCorquodale , Grupo de Trabajo sobre empresas y derechos humanos
·
Claudia
Flores (Vicepresidenta), Dorothy Estrada Tanck, Ivana Krstić y Haina Lu , Grupo de trabajo sobre
discriminación contra las mujeres y las niñas
·
Jovana
Jezdimirovic Ranito (Presidenta-Relatora), Ravindran Daniel, Michelle Small,
Joana de Deus Pereira, Andrés Macías Tolosa , Grupo de Trabajo sobre el uso de
mercenarios
·
Bina D'Costa
(Presidenta), Barbara G. Reynolds, Isabelle Mamadou , Grupo de Trabajo de Expertos sobre
Personas de Ascendencia Africana
·
Elizabeth
Salmón ,
Relatora Especial sobre la situación de los derechos
humanos en la República Popular Democrática de Corea .
·
Farida
Shaheed , Relatora Especial sobre el derecho a la educación
·
Elisa Morgera , Relatora Especial sobre la
promoción y protección de los derechos humanos en el contexto del cambio
climático
·
Heba Hagrass,
Relatora Especial sobre los derechos de las personas con
discapacidad
·
Carlos Duarte
(Presidente), Grupo de Trabajo sobre los derechos de los campesinos y
otras personas que trabajan en zonas rurales
·
Reem Alsalem,
Relatora Especial sobre la violencia
contra las mujeres y las niñas, sus causas y consecuencias

No hay comentarios:
Publicar un comentario